Coincidiendo con la celebración hoy del Día Internacional de la Mujer Rural, el Área de la Mujer de Coag ha demandado más servicios en el medio rural que permitan a las mujeres conciliar la vida laboral y familiar. Desde esta organización agraria han señalado que sólo el 8 por ciento de las explotaciones agrarias están dirigidas por féminas y, sin embargo, éstas representan el 37 por ciento de la mano de obra agrícola en Europa. Coag ha indicado que la relativa escasez de equipamientos y servicios públicos son dos de las principales causas que impiden una fácil conciliación de la vida familiar y laboral. En este sentido, Belén Verdugo, responsable del Área de la Mujer de Coag, ha comentado que «consideramos necesarias medidas que permitan conciliar nuestro ámbito privado y laboral, tanto a hombres como a mujeres, pero hay que tener en cuenta que la carga histórica deja el cuidado de mayores, niños y dependientes en general, así como las tareas del hogar, a las mujeres y esto en el medio rural se acrecienta». Por todo esto, desde esta organización agraria exigen «leyes de igualdad efectiva llevadas a cabo en todos los territorios y que hagan especial hincapié en las zonas más afectadas por situaciones desiguales, como el medio rural», ha señalado Belén Verdugo. Para que esto pueda llevarse a cabo y, finalmente, la mujer se haga visible en la sociedad rural, es necesario que ésta consiga la titularidad de las explotaciones agrarias. De este modo, la mujer podría figurar en documentos bancarios, subvenciones, e incluso, obtener ayudas fiscales. Asimismo, la titularidad implica el derecho a la representación en los organismos asociativos y colectivos. Desde el Área de la Mujer de Coag han señalado que trabajarán para que en el próximo Real Decreto se recoja la titularidad compartida en el sector agrario, ya que «las mujeres somos conscientes de nuestra responsabilidad en la alimentación de los consumidores, estamos orgullosas de ser productoras y no queremos vernos obligadas a abandonar el medio rural, sino que se den las condiciones adecuadas para perpetuar la vida en el mismo», ha concluído Belén Verdugo.