Alternativas Las diferentes opciones propuestas al uso del bromuro de metilo, fueron tanto químicas (la cloropricrina o el dicloropropeno), como no químicas. “Las alternativas que desde la experiencia de Almería trasmitimos fueron los injertos de melón y sandia sobre piel de calabaza”, explica Tello. Este taller ha dado lugar a una serie de experimentos demostrativos en las explotaciones de grandes empresarios y de agricultores de la zona mexicana, mediante los cuales han podido comprobar cómo funciona el injerto y asimismo dará lugar a un entrenamiento del personal del campo para que puedan aprender a realizar injertos. “Los conocimientos generados por investigadores, técnicos y agricultores de esta tierra son los que están sirviendo para cubrir las necesidades de México, y que puedan llevar a cabo la retirada del bromuro de metilo”, añade Julio Cesar Tello. Junto con Tello, Francisco Camacho Ferre también ha formado parte en este viaje como “consultores de las Naciones Unidas para este la retirada del bromuro de metileno bajo el amparo del Protocolo de Montreal”. Camacho Ferre sigue aun en México realizando un curso de enseñanzas propias de la Universidad de Almería. “Entre Almería y México se está generando una relación muy estrecha tanto con universidades, como con centros de investigación para preparar unos estudios de postgrado que probablemente comenzarán en septiembre de este año y que serán propios de la Ual para impartir en tierras mexicanas”, indica Tello. “A pesar de todo lo que se haya podido decir fuera y dentro de Almería, en la provincia se ha desarrollado una excelente forma de cultivar como es el cultivo enarenado, las rotaciones de cultivo que se dan dentro de los invernaderos, entre otras cosas, y esto está sirviendo de ejemplo para América”, añade el profesor de la Ual. El interés para la Universidad de Almería es que las empresas almerienses puedan desarrollar a grandes escalas estas tecnologías en México. Otros cultivos El taller contempló además de las mejoras para los cultivos de melón y sandia, uno para tomate en la Universidad de Sinaloa. “El injerto de tomate se realiza en muchos de lo cultivos almerienses, no sólo para controlar los patógenos de las plantas, sino por el incremento tan notable en producción que esta técnica supone”, explica Tello. El director del Área de Producción Vegetal de la Universidad de Almería añade también que en un principio el injerto de tomate que se haga en los cultivos mexicanos, será para el control de las enfermedades de la planta y posteriormente se centrará en aumentar la producción. En el mes de abril Tello volverá a viajar a México para presentar las alternativas del uso del bromuro de metilo al cultivo de fresón. Además se reiniciará otro taller sobre flores que ya en Almería se han podido lograr una serie de resultados positivos como es el compostado de los restos de cosecha para la reducción de enfermedades del suelo, que es el proceso que se conoce como biofumigación y biosolarización. “Me satisface que tanto la provincia como la universidad, este sirviendo como una cadena de transmisión de conocimientos básicos, y que a lo largo de los años han sido aquí aplicados, no sólo por los investigadores, sino por los agricultores que asimismo generan investigación con la inquietud que tienen de experimentar con las plantas” , Tello. Ya desde 1998 la Ual se puso en contacto con universidades mexicanas, pero también con China, de Uruguay, Guatemala, Honduras y posiblemente establezcan muy pronto un lazo de unión con Costa Rica. Protocolo de Montreal El bromuro de metilo es usado en las actividades agrícolas que se desarrollan en el Estado de México. Se utiliza como plaguicida para la desinfección de suelos y para prevenir plagas en almacenamiento de granos, semillas y harinas. Es una sustancia dañina para la capa de ozono, y afecta a las esferas del medio ambiente, el comercio y el desarrollo sostenible. En el año 1987 diversos países se reunieron en Montreal para llegar a un acuerdo internacional en el que se buscaba la eliminación gradual del consumo y producción de sustancias que perjudican a la capa de ozono como es el caso del bromuro de metilo. México fue uno de los primeros países que ratificó y suscribió este acuerdo. Esta sustancia además de perjudicar al ser humano provoca cambio en el crecimiento y la producción de los frutos y disminuyen su rendimiento. Eunate Serrano