El Instituto de Investigación Agraria y Pesquera ha celebrado un Seminario en el centro IFAPA Camino del Purchil de Granada con el fin de dar a conocer al sector las técnicas más eficientes para el cultivo de tomate bajo abrigo. Esta actividad, enmarcada en el Ciclo anual de Seminarios de Actividades de Investigación y Transferencia Tecnológica del IFAPA, pretendía mostrar que la elección de la mejor estructura de invernadero puede mejorar el rendimiento final de la cosecha y minimizar la inversión principal de montaje y mano de obra, que llega a ser de un 64 por ciento del coste unitario del cultivo. La ponencia, que estuvo a cargo de Ignacio Escobar, jefe de gabinete técnico de la Caja Rural de Granada y director de la finca experimental ‘La Nacla’, en Motril, abordó las perspectivas de futuro del cultivo de tomate bajo abrigo, que según Escobar, “pasan por mantener la calidad externa y mejorar su calidad interna, gracias básicamente a la mejora genética, la aplicación de la lucha biológica y la mejora de las técnicas culturales”. Escobar añadió que para competir en el mercado internacional con países como los del Norte de África o los nuevos miembros de la Unión Europea, es necesario disminuir la superficie de cultivo e incrementar los tipos de tomate de ‘especialidades’, como son el cherry o el ramo. El tomate, hortaliza más cultivada en el mundo, es también el primer producto español y al que se le dedica mayor superficie de siembra, un total de 16.000 hectáreas, seguido de Turquía con 13.000 e Italia con 6.500 hectáreas.