La Junta de Andalucía realizó durante el pasado año 2.119 inspecciones de calidad agroalimentaria con el objetivo prioritario de velar por el cumplimiento de las normativas relativas a la seguridad de los consumidores. Una de las consecuencias principales de esta tarea de vigilancia fue que los técnicos de la administración autonómica tomaron muestras para su análisis de casi 14.400 toneladas de alimentos y bebidas. Destacan por su cuantía los controles realizados durante el pasado año en productos de origen vegetal, con 1.095 inspecciones y 495 muestras analizadas, correspondientes a unas 13.500 toneladas. En cuanto a alimentos de origen animal se han realizado 773 controles sobre un volumen total de 76.014 kilos. Por último, en relación con las bebidas, principalmente vinos, la Junta ha realizado 251 análisis correspondientes a 864.453 litros. Las inspecciones llevadas a cabo en el año 2008 se han centrado principalmente en el control de origen de la calidad de los productos, los procesos de elaboración, así como de los registros administrativos y documentación preceptiva de las empresas. Todo ello para garantizar los intereses de los consumidores y la transparencia de las transacciones comerciales, evitando posibles fraudes o adulteraciones alimentarias.