Precisamente la ‘delicadeza’ de este tomate dificulta bastante el poder sacar adelante una cosecha y, quizás por ello, en toda la provincia de Almería existen apenas 700 hectáreas de este cultivo. Como ya apuntara el propietario de Rey Raf, uno de los principales problemas de este cultivo es que tiene una raíz muy débil y, por ello, desde la Cooperativa Agrícola San Isidro (Casi), indicaron que «necesita un trato muy especial» y, de ahí que «sólo los agricultores más veteranos y experimentados sean capaces de sacar adelante esta variedad». En cualquier caso, en lo que va de campaña, Casi ya ha comercializado a través de su subasta más de 1’5 millones de kilos. Por último, desde las comercializadoras especializadas en el cultivo de Raf afirmaron que el mercado nacional sigue siendo su principal cliente y, de hecho, la mayoría de ellas destina el 100 por cien de su producción a los consumidores españoles.