Bruselas propondrá al Consejo de ministros de la UE y al Parlamento Europeo (PE), después del verano, la ratificación del convenio alcanzado con Rabat para liberalizar el comercio agrícola, que aumentará las concesiones a la entrada de tomate marroquí.

Los servicios de la CE tienen prácticamente listo el documento legislativo que refleja ese acuerdo, pero su tramitación no está terminada por cuestiones como la traducción, por ejemplo, y por ello, el Ejecutivo comunitario no presentará el texto hasta septiembre, según han explicado las mismas fuentes.

El compromiso agrícola tiene que ser aprobado formalmente por la UE y por el rey marroquí para que entre en vigor, lo que por lo menos no se espera hasta mediados de 2011.

Los representantes de Bruselas y Rabat cerraron el pasado mes de noviembre, tras cuatro años de negociaciones, un nuevo protocolo agrícola del Acuerdo de Asociación, en el que destaca el aumento del acceso de las frutas y hortalizas de Marruecos al mercado europeo, especialmente en el caso del tomate.

El arreglo incrementará los cupos de importaciones de tomate marroquí que llega a los países comunitarios con un arancel reducido, entre octubre y mayo, y partirán de 254.000 toneladas hasta situarse en un máximo de 285.000 toneladas cuatro campañas después.

En la actualidad, esa cuota es de 233.000 toneladas y, por encima de dicho contingente, Marruecos puede vender tomate a la UE pero en las mismas condiciones que cualquier otro país tercero.

Las cesiones en tomate son las que más han preocupado al sector español, por su competencia con la producción de zonas como Murcia, Almería o Canarias y el temor a que el mercado europeo se vea inundado con producto marroquí a bajo precio.

Además, los productores españoles se quejan de que Marruecos no respeta el actual acuerdo.

Por su parte, en el nuevo protocolo el país norteafricano se compromete a liberalizar el 45% de las importaciones agrarias de la UE de inmediato y tras un plazo transitorio el 61%, en cinco años, y el 70% en diez.

Marruecos ofreció a la UE sobre todo concesiones en los envíos de productos agrícolas transformados, en lácteos, oleaginosas y en cereales.


FUENTE: PORTAL BESANA