La planta desaladora del Bajo Almanzora, en Almería, que en la actualidad ya se encuentra en su fase final de construcción por parte de Acuamed, incorpora en su diseño toda una serie de avances e innovaciones tecnológicos orientados a conseguir una mayor flexibilidad de operación, así como una mayor eficiencia energética. Con ello, esta infraestructura será una de las más punteras del país en materia de ahorro de energía.

Las innovaciones tecnológicas implantadas permitirán un ahorro en el consumo de energía eléctrica que se puede cuantificar en una horquilla de entre 0,29 a 0,11 kWh por metro cúbico producido. Esta mayor eficiencia energética sería equivalente, en términos de emisiones de CO2 a la atmósfera, a una reducción entre 1.200.000 y 450.000 kg al año.

Esta es una de las principales conclusiones que dio a conocer Javier Alcántara, ingeniero de Acuamed y director de obra de la planta del Bajo Almanzora, en su intervención en la jornada dedicada a la desalación en el marco del VIII Congreso que la Asociación Española de Desalación y Reutilización (AEDyR) celebra en Barcelona.

"Perseguir la máxima eficiencia energética de la instalación, no sólo en las condiciones óptimas de diseño, sino de una manera flexible, ante variaciones en la calidad de agua captada, de picos de demanda o incluso para las diferentes calidades de producción, es el objetivo perseguido en el diseño de la Planta", señaló Alcántara, quien apuntó que, en su opinión, la optimización en los costes de explotación en las plantas será la garantía de éxito de las mismas.

Alcántara explicó que el objetivo perseguido en la planta es "la máxima eficiencia técnica y económica en la operación, adaptándose en cada momento a la variación de factores externos", como son calidad del agua bruta o demanda de agua producto, entre otros. La ponencia presentada por Acuamed contó con la participación de expertos en la materia, procedentes de empresas españolas especializadas en desalación, un sector que, gracias al impulso del programa de desalación del Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, se ha convertido en uno de los más competitivos a nivel internacional.

En este sentido, entre los elementos más innovadores incorporados a la planta figuran, entre otros, una toma mixta, con pozos profundos y toma abierta, variadores de frecuencia en las bombas de alta presión y el diseño de la instalación como un nodo de intercambio del sistema de distribución, con depósitos de regulación diaria a pie de planta, así como una estación de elevación de agua producto con funcionamiento en dos escalones de bombeo. La tecnología empleada, permitirá en el futuro el empleo de membranas de alto rendimiento, sin necesidad de modificar la instalación.

El VIII Congreso de Aedyr, reúne, durante los días 28, 29, 30 de septiembre y 1 de octubre, algunos de los más reconocidos expertos nacionales e internacionales en materia de desalación y reutilización de aguas. Está dirigido a los actores implicados en el sector del agua y sirve como foro de diálogo y comunicación entre los diversos colectivos que operan en este importante mercado. Fue inaugurado en su primer día, dedicado a la desalación, por Marta Moren, directora general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino; Imma Mayol, teniente alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y responsable del área de Medio Ambiente; Manuel Hernández, director de la Agència Catalana de l'Aigua y Manuel Rubio, presidente de AEDyR.