El 11 de octubre de 2009 la cota del agua embalsada en la Balsa del Sapo, con la referencia de la medición permanente que hace el Ayuntamiento de El Ejido, indicaba que el nivel se encontraba 70 centímetros más alta que el nivel de septiembre de 2003. Doce meses después, este nivel señala que el agua está 2 metros y 50 centímetros más alta que respecto a esa fecha de referencia.

El panorama ante el comienzo del invierno y las más que previsibles precipitaciones es "preocupante, porque no sólo ha empeorado la situación sino que la falta de soluciones es clamorosa y augura mayores complicaciones", dice Viseras.

"Lamentamos que no se hayan aportado soluciones en todo este tiempo y que los bombeos actuales sean dramáticamente insuficientes", dice el concejal ejidense, quien además destaca el hecho de que la Junta de Andalucía ha metido en un cajón su promesa de hacer un drenaje para la zona de La Molina. "Allí hay invernaderos encharcados; el Ayuntamiento se comprometió el 30 de diciembre de 2009 a hacer mediciones topográficas de la zona para que la Junta hiciera un drenaje una vez que les entregáramos los datos. El Ayuntamiento hizo esas mediciones pero no tenemos noticias de la obra que iba a hacer la Junta. Ahora van a llegar de nuevo las lluvias y ni siquiera han redactado el proyecto de drenaje".

Igualmente lamentable es el hecho de las ayudas prometidas a los agricultores afectados por la crecida del nivel. El Ayuntamiento de El Ejido hizo los correspondientes informes de daños y se los hizo llegar a la Junta junto con la relación de agricultores afectados. Este listado se hizo llegar por dos vías: a través de la propia administración y a través del parlamentario andaluz Manuel García Quero (PSOE). "¿De qué sirvió la reunión que mantuvimos con él y la Junta, donde se comprometieron a presentar la petición a la Consejera de Agricultura?", se pregunta Viseras, "tristemente no ha llegado ayuda a ninguno de nuestros agricultores, y los han engañado vilmente en las varias reuniones posteriores que han querido tener a solas con ellos, sin la presencia reivindicativa del equipo de gobierno del ayuntamiento de El Ejido".

Excursiones "populares"

En todo este drama de los vecinos de Las Norias "nos encontramos la parte folclórica, las excursiones que han montado tanto PP como PSOE a la Balsa del Sapo para retratarse junto al agua y en los invernaderos lamentablemente encharcados". De nada ha servido ese despliegue de medios y esa pérdida de tiempo: "prácticamente, lo único que se está haciendo es medir el nivel de la lámina y porque es una decisión y una iniciativa de la Concejalía de Agricultura del Ayuntamiento de El Ejido desde 2003, para demostrarle al PP y al PSOE que ya entonces el agua subía peligrosamente cada año".

"Después de tantas fotos como se ha hecho el PP junto a la balsa, después de las excursiones de sus diputados, no han conseguido nada en el Parlamento Andaluz para solucionar el problema", lamenta Jorge Viseras.