De esta manera, el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM)  rompe el compromiso adquirido con el sector en 2004 para garantizar una ayuda estatal que complementara los fondos comunitarios y autonómicos y conseguir así que el importe global ascendiera a 241,50 euros/hectárea. Además, el Ministerio también se comprometía a conceder un complemento a los agricultores profesionales titulares de explotaciones de frutos secos.

UPA lamentan la escasa sensibilidad el MARM hacia un sector que sufre una grave  crisis de precios: desde 2005, el precio de la almendra en cáscara se ha reducido en un 58% y el de la avellana negreta ha caído un 56%. Asimismo, los representantes del sector confirman su temor sobre la intención del Ministerio de eliminar la ayuda estatal complementaria en el momento en el que los frutos de cáscara pasen a formar parte del pago único (2012), cuestión que sería catastrófica para el sector, a pesar de que la normativa comunitaria establece que se podría seguir complementando por los Estados Miembros la ayuda de Bruselas.