-Recientemente presentaron en el Parador de Mojácar su nuevo vino, ‘Talento Syrah'. ¿Qué acogida tuvo entre el público asistente?

-Realmente buena. Todo el mundo valoró una mejoría con respecto a la cosecha del 2006, tanto en el vino como en su nueva imagen.

-¿Qué diría de este vino? ¿Qué cualidades tiene y cómo ha sido su proceso de creación?

-Bajo nuestra marca ‘Talento' se encuentran las variedades de tinto que completan su proceso de fermentación en barrica. En el caso de nuestro ‘Talento Syrah', su estancia es de entre siete y ocho meses en roble americano y, posteriormente, completa otros ocho meses en botella hasta su comercialización. Resumiendo, es un vino muy equilibrado, con una estructura notable, suave y con una excelente nariz.

-La suya es una bodega muy joven, de hecho, nació en 2004. ¿Cómo les ha ido desde entonces hasta ahora?

-Todo se resume en mucho trabajo y dedicación. No sólo es el esfuerzo de cualquier empresa que empieza en cuanto a comercialización, organización o mejoras del proceso productivo, sino el propio aprendizaje de la cultura del vino actual.

-Sus vinos cuentan con el distintivo ‘Vinos de la Tierra Laujar-Alpujarra'. ¿Qué supone esto?

-Para entenderlo es imprescindible visitar la zona. Aquí existe una tradición vitivinícola que se remonta a la época de los fenicios, además de unas condiciones privilegiadas para el cultivo de la vid. Es un orgullo para nosotros.

-Su bodega está ubicada en la zona, por decirlo de alguna manera, más vitivinícola de la provincia. ¿Qué aporta esta zona en especial a los vinos?

-Clima, suelo y calidad de la uva. Con respecto a otras denominaciones de origen, aquí no se elaboran grandes cantidades con fines comerciales. Y eso, sin duda, lo aprecia el consumidor.

-Centrándonos un poco en el cultivo. ¿Qué tal fue la última campaña?

-Muy buena. Ha sido un buen año para nuestras distintas variedades de uva y hemos elevado el nivel en el proceso de vendimia. La bodega ha crecido, profesionalmente hablando.

-¿Considera que, hoy por hoy, es muy fuerte la competencia en este sector?

-Por supuesto, sobre todo por la cultura del precio. No tenemos ningún complejo en competir en calidades con ‘Ruedas' o ‘Riojas', pero sí tenemos reparos en cuanto a la tendencia al regateo. Y lo peor es que, normalmente, se produce por el propio desconocimiento del vino. Con frases como "los ingleses se beben cualquier cosa", todos perdemos en competitividad.

-¿Es difícil para los vinos almerienses introducirse en el mercado?

-Con estas condiciones de mercado, sí, pero todo está cambiando. La gente comienza a apostar por el producto local y eso es la base para llegar a otros mercados. Tenemos el privilegio de ser una zona de tránsito turística y hay que aprovecharlo para otras cosas que no sean especular con la vivienda.

-Y hablando de mercados, ¿cuáles son los suyos?

-Almería, Málaga y República Checa. Nuestro objetivo para este año es tener más presencia en el resto de Andalucía y elevar las ventas en Centroeuropa.

-Por último, ¿qué planes de futuro tienen para la Bodega Fuente Victoria?

-Estamos trabajando en otras líneas que permitan seguir introduciendo nuestros caldos como, por ejemplo, el enoturismo o la gestión de eventos. También seguiremos elevando las exigencias en nuestra forma de trabajar.



ISABEL FERNÁNDEZ