Los candidatos al Congreso y al Senado por Izquierda Unida, Rodrigo González y José Antonio Barrera Espín, junto a la coordinadora provincial Rosalía Martín, mantuvieron ayer una reunión de trabajo con varios miembros de COAG, como su secretario provincial, Andrés Góngora y otros miembros de la dirección.

En el encuentro se contrastaron los problemas más acuciantes del sector en nuestra provincia tales como la continua pérdida de beneficios del sector campaña, tras campaña y el aumento paulatino de los costes de producción, la problemática de los residuos agrícolas, el estado de los caminos rurales o la necesidad de una Ley que fije precios mínimos, entre otros temas.

Pero los temas centrales fueron la situación de crisis económica global que afecta de forma directa a la agricultura y la ganadería , por entenderse ésta como un producto del mercado y no como producto de primera necesidad, de soberanía alimentaria y la necesidad de la intervención por parte de los estados en la soberanía alimentaría de cada país, así como la necesidad de que los productos agroalimentarios estén fuera de la Organización Mundial del Comercio y de los mercados, junto al proyecto de reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) que el comisario de agricultura de la UE Dacián Ciolos ha presentado recientemente.

En este sentido la coordinadora provincial se comprometió con la organización agraria a presentar en las instituciones con presencia de IU mociones de rechazo al proyecto de reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) "ya que pretende establecer una tarifa plana de distribución homogénea por hectáreas, haciendo tabla rasa de los derechos históricos, se trata de poner en la práctica una tarifa plana que a todas luces ayuda a generar más desigualdades bajo la falsa apariencia de igualitaria. La implantación de esta tarifa plana incentiva la agricultura no productiva, o sea la posesión de terreno agrícola frente a la producción del sector primario y al empleo que este genera. Igualmente trata como agricultor a aquella persona que de sus ingresos totales, sólo el 5% provengan de la agricultura, podrán beneficiarse de las ayudas sin ser profesionales de la agricultura. Eso nos parece un agravio comparativo para los hombres y mujeres que viven sólo y exclusivamente del trabajo y los rendimientos de sus explotaciones agrarias, es decir los y agricultores y agricultoras o los criterios falsamente verdes que impulsa este proyecto de reforma".

El candidato al Congreso, Rodrigo González ha manifestado especial preocupación por los sectores ganaderos que se verían muy perjudicados y que tienen poca o nula base territorial, "ya que muchos profesionales tienen derechos especiales que se perderían con una ayuda vinculada a la hectárea y ha recalcado que su rechazo recala también en la falta de regulación de los mercados en que incurre la propuesta del comisario Ciolos, pues no va a resolverse el principal problema de los rendimientos de la actividad productiva en el campo, que es la distancia que existe entre lo que percibe el agricultor por la venta de sus productos y los precios finales en el mercado"

Para Rodrigo González "la intención de esta nueva reforma de la PAC es defender a los especuladores de las grandes cadenas de la distribución frente a los productores y agricultores que se ganan la vida personal y familiar con la actividad productiva. Nada para la producción, todo para la especulación agroalimentaria".