Casi noventa agricultores de edades comprendidas entre los 55 y los 65 años se han acogido en 2011 a los incentivos públicos para el cese anticipado de su actividad en el campo en la provincia de Almería, con lo que facilitan la incorporación de jóvenes a la actividad agraria.

El relevo generacional en el campo es uno de los objetivos de la política agraria de la Junta de Andalucía, que considera vital para los territorios rurales de la Comunidad que los más jóvenes vean atractiva esta actividad y decidan permanecer en sus municipios.

En total, la Consejería ha concedido 88 expedientes por el cese anticipado de la actividad agraria por un importe de 1,1 millones de euros, ayudas por las cuales agricultores mayores ceden 141 hectáreas de invernadero a agricultores profesiones y jóvenes, mientras que están pendientes de cesión otras 8 hectáreas.

En el año 2010, la Consejería de Agricultura y Pesca recibió 30 solicitudes para esta línea de ayuda, y en 2009, 3 solicitudes. El delegado provincial de la Consejería, José Antonio Salinas, valora este notable incremento, ya que, por un lado, significa que muchos jóvenes de la provincia siguen viendo en la agricultura una actividad atractiva y rentable, y por otro, que con el rejuvenecimiento del campo se favorece la modernización de las explotaciones y, por tanto, su competitividad.

Otro hecho importante que se desprende de las solicitudes de ayuda para el relevo generacional en la actividad agraria es que 27 han sido presentadas por mujeres, un dato que viene a indicar el creciente interés de la mujer por la agricultura.

Las ayudas al cese anticipado son un mecanismo que al tiempo que garantiza una renta adecuada a los agricultores de más edad que ceden sus explotaciones a los más jóvenes, permite que éstos incrementen la dimensión de dichas explotaciones, corrigiendo así los desequilibrios y las deficiencias estructurales que ponen en peligro la supervivencia misma de la actividad agraria.

Plazo y requisitos

La ayuda al cese anticipado de la actividad agraria es una medida prioritaria de la Consejería de Agricultura, recogida en el Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2007-2013, cofinanciada con fondos europeos Feader.

Las personas que cedan sus explotaciones tienen que ser personas físicas, con una edad comprendida entre 55 y 65 años, que hayan ejercido la actividad agraria durante los diez últimos años, y haber cotizado a cualquier régimen de la Seguridad Social un periodo previo, de manera que al cumplir los 65 años, el solicitante haya cotizado al menos 15 años. Asimismo, tendrá que acreditar su condición de agricultor a título principal en el momento de presentar la solicitud.

Por su parte, la persona joven que se hace cargo de la explotación cedida debe acreditar un año de antigüedad como titular de explotación agraria, y tener menos de 50 años en el momento de la cesión. Asimismo, debe estar dado de alta en el Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social o en el Especial de Trabajadores Autónomos -en función de su actividad agraria- y haber cotizado al menos un año.

Como consecuencia del aumento de la dimensión de su explotación, también debe ejercer o pasar a ejercer la actividad agraria como agricultor profesional. Asimismo, podrán acogerse los agricultores jóvenes que se instalen por primera vez en una explotación agraria, según la medida 112 ‘Primera instalación de jóvenes agricultores'.

Importe de las ayudas

Si el cónyuge de quien cede su explotación no recibe la ayuda por cese de la actividad agraria, percibirá una indemnización anual de 9.885 euros, o de 7.980 euros, si el cónyuge también recibe la ayuda. Además, si el cesionario es un joven agricultor en primera instalación, el que cede la explotación obtendrá un 10% adicional.

Asimismo obtendrá una prima anual complementaria por hectárea tipo que ceda de la explotación, sin exceder 3.000 euros por beneficiario.