La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha elevado las pérdidas en el sector hortofrutícola español en más de 150 millones de euros por las olas de frío registradas en febrero.

En un informe difundido, la organización señala que la producción más afectada es la citrícola, con un área de alrededor de 30.000 hectáreas y un montante de 95,5 millones de euros.

A continuación sitúa a los frutales, con daños en más de 5.000 hectáreas y un valor total de 38 millones de euros.

En el caso de las hortalizas, el frío ha afectado tanto a las protegidas por invernaderos como a las cultivadas al aire libre, que en conjunto han sufrido siniestros en unas 4.000 hectáreas, por importe de 17,5 millones de euros.

El informe de COAG recoge que la primera ola de frío que se registró entre el 2 y el 5 de febrero provocó daños en cultivos de todo el arco mediterráneo y Andalucía, mientras que la segunda ola -del 12 al 15 de febrero- tuvo un efecto acumulativo y ha confirmado "los peores presagios en le sector hortofrutícola", además de causar daños en madera que pueden afectar a la próxima cosecha frutícola.

En concreto, agravó los daños en Murcia, además de afectar a la Comunidad Valenciana y Andalucía.

Por regiones, en Andalucía los mayores daños están en Almería, con entre 1.000 y 2.000 hectáreas afectadas.

En Granada se ha destruido un 25 % de la cosecha en invernaderos de las Alpujarras, con alrededor de 1,8 millones de kilos dañados de berenjenas, calabacín, pimiento y tomate, a los que se suman perjuicios en la superficie de guisante al aire libre, y dos millones de euros en pérdidas.

En municipios como Cádiar o Ugíjar ha afectado a la totalidad de la cosecha de almendros, que se encontraban en estado de floración, con 1.900 hectáreas y pérdidas por encima de los 250.000 euros.

En el Valle de Lecrín se están evaluando los daños en unas 800 hectáreas de cítricos.

En la provincia de Cádiz, destacan los daños en plantaciones de aguacates (se ha perdido el 80 % del total) y cítricos en Campo de Gibraltar (con daños al 50 % de la producción), donde se llegó a los siete grados bajo cero.

En Huelva subraya la grave afectación de la floración en cultivos de fresa, frambuesa y arándanos, lo que puede generar "importantes descensos" en la producción.

En cuanto a Málaga, la zona con mayores daños ha sido la Axarquía, con 2.000 toneladas de aguacate dañadas y unos 3 millones de euros en pérdidas, a los que se suman 180 hectáreas de patata, el 60 % del total de la extratemprana, por unos 1.500 millones.

También han sufrido las plantaciones malagueñas de alcachofa, con 3.500 toneladas dañadas y más de 2,1 millones de euros en pérdidas.

Finalmente, para Córdoba y Sevilla constata que los cítricos han sido los cultivos más afectados, con daños variables que en algunas zonas afectan al 70 % de la producción y que se extienden a yemas y brotes, lo que repercutirá en la campaña próxima.

En la Comunidad Valenciana, las heladas perjudicaron unas 70.000 hectáreas, en particular de cítricos, y los daños se estiman en más de 75 millones de euros, con las comarcas de la Ribera Alta y el Camp de Turia como las más afectadas.

En Murcia, se ha perdido el 100 % de la cosecha extratemprana de fruta de hueso y más del 30 % de la temprana, que se encontraba en plena floración en Cieza y otras áreas productivas.

En el caso de las hortalizas, hay daños en el 90 % de la alcachofa y la lechuga, sobre todo en el Valle de Guadalentín y Campo de Cartagena, donde también se ha perdido el 20 % del cultivo de patata y se han visto dañadas plantaciones de brócoli y coliflor.

En Aragón, han sufrido los cultivos de alcachofa, acelga y borraja en la zona de Zaragoza, mientras que los frutales y almendros han salido indemnes.

En Cataluña, el Baix Llobregat es la zona más castigada por el frío, con plantaciones de alcachofas, habas y guisantes "seriamente dañadas".

En Baleares, hay afectados al menos 200.000 metros cuadrados de invernaderos de pimiento, tomate y calabacín, así como plantaciones de patata extratemprana destinada a la exportación, a lo que hay que sumar retraso en el crecimiento de hortalizas de invierno.



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