De esta manera, las agricultoras y ganaderas quieren sumarse a la "Marea Violeta" contra el retroceso de las políticas de igualdad, exigiendo a los diferentes gobiernos autonómicos agilidad y rapidez para crear los registros de titularidad compartida, paso previo imprescindible para que las mujeres rurales puedan disfrutar de los derechos económicos y sociales que recoge la nueva normativa sobre titularidad compartida de las explotaciones, publicada en el BOE del pasado 5 de enero.  Además, es algo de obligado cumplimiento ya que  la Ley Orgánica insta a los Ministerios responsables de la Política de Igualdad y de Desarrollo rural que se diera forma jurídica a la Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias a través de la administración regional. "Estamos recibiendo decenas de consultas de afiliadas y afiliados que quieren hacer efectivo este derecho ciudadano registrado ya en los textos legales y que no pueden verlo hecho realidad porque las administraciones autonómicas no han habilitado los registros al efecto", ha apuntado Mª Carmen Ramón, responsable del Área de Igualdad de COAG Andalucía.

Asimismo, desde el Área de Igualdad de COAG-A se exige el cumplimiento de la Ley de Igualdad estatal y de todas las leyes internacionales,  actualmente amenazadas con la excusa de la crisis. "El retroceso y parálisis en temas de igualdad supone una violenta agresión a los avances logrados durante toda la democracia en los derechos de las mujeres", ha matizado Ramón.  Además, las mujeres de COAG exigen que los presupuestos Generales del Estado para el año 2012, pendientes de aprobación, se hagan con un riguroso Informe de Impacto de Género tal y como indica el artículo 19 de la Ley de Igualdad.

Mujeres y Agricultoras, vitales para garantizar la soberanía alimentaria. En estos días se ha celebrado la 56ª Sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer centrada en el Empoderamiento de la Mujer Rural y su papel en la erradicación de la pobreza y el hambre en el desarrollo y los desafíos actuales. En el siglo XXI no se puede permitir que las mujeres continúen teniendo obstáculos para acceder a la tierra. El acceso a la misma permite la producción de alimentos y es una inversión hacia el futuro y colateralmente capacita para solicitar créditos. En los casos en que son titulares, el valor de la tierra es menor y las extensiones más pequeñas. "Convencidas de que somos las responsables de alimentar al mundo queremos implantar la Soberanía Alimentaria mentalizando a la Comisión Europea de que  la futura PAC tiene que hacerse eco de las leyes que instan a incorporar la perspectiva de género. Según la Unión Europea, conseguir la igualdad es clave en  la estrategia 2020" ha afirmado Ramón.