Durante su intervención en este encuentro que se celebró en Almería bajo el título 'Las Cooperativas Agrícolas en el Siglo XXI', la directora general ha puesto en valor el papel de las cooperativas ante la actual coyuntura económica, ya que este modelo "contribuye a repartir la riqueza de forma más equitativa". Además, ha resaltado que estas entidades encajan a la perfección en la estrategia europea, que apuesta por primar el desarrollo inteligente, sostenible e integrador. En el caso del sector agroalimentario, "las cooperativas han supuesto un pilar fundamental para el desarrollo del campo andaluz", ha destacado Romero.  

En cuanto a la campaña actual, la directora general ha reconocido las dificultades que se presentan para los productores pero ha hecho hincapié en las posibilidades de las las frutas y hortalizas andaluzas para competir en el mercado y asumir los retos a los que se enfrenta el sector estos días. Para afrontar esta situación, Romero ha aludido a la necesidad de continuar mejorando en la concentración de la oferta, la potenciación de las ventas al exterior, y la diferenciación de los productos a través de una oferta de mayor calidad y sostenibilidad que destaque por su garantía de seguridad y trazabilidad.   Desde la Consejería, se ha respaldado de forma especial a las empresas de economía social a través de mayores incentivos para la modernización y en los procesos de concentración, entre otros ámbitos, con el fin de facilitar su desarrollo.

Además, a este apoyo institucional, se suma desde febrero la nueva Ley de Cooperativas, que allana el camino para lograr un sector cooperativo más moderno y competitivo de cara a la globalización del mercado.   Andalucía es líder en número de empresas de economía social con cerca de 7.800, el 24,5% del total nacional. De ellas, casi 4.200 son cooperativas. Este sector emplea en nuestra comunidad autónoma a más de 75.000 personas, la mayoría en empresas cooperativas (más de 59.600).