El Ayuntamiento de Roquetas de Mar, ante el vertido de aguas que la Junta de Andalucía está realizando sobre la Rambla del Cañuelo, ha querido manifestar que no se opone al vertido de estas aguas, ya que entiende los problemas que padece el núcleo ejidense de Las Norias, pero solicita que éste se realice con todas las medidas de seguridad necesarias para que no ocasione problemas y daños a los agricultores, ni dificulte el paso por vías rurales a viandantes o ciclistas, e incluso, pueda llegar a impedir la circulación por alguna de ellas.

Para ello, el Ayuntamiento de Roquetas de Mar va a solicitar la entubación integral en todo el trayecto y un emisario al mar para evitar, a su vez, graves problemas a su llegada a la playa. Estas aguas están desembocando en la playa, no directamente en el mar, por lo que al no haber escollera para el desagüe, está originando un fuerte impacto, no sólo en la propia arena, donde ya se puede apreciar una profundísima correntía causada por la erosión del caudal, sino también en la flora y fauna marina.

Por otro lado, desde el Consistorio roquetero se preguntan si hay informes técnicos sobre el posible daño medioambiental que generará este vertido sobre el monumento Natural de Posidonia, situado en la Ventilla y sobre la calidad del agua para el baño, con el problema natural y turístico que esto produciría.

Hasta el día de hoy, el Ayuntamiento de Roquetas de Mar ha intentado concienciar a la Junta de Andalucía de la gravedad del problema que estaba ocasionando; para ello, ha enviado tres informes en los que solicitaba las medidas de seguridad que por ley le corresponden y ha mantenido contactos con el delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, José Manuel Ortiz, e incluso, con el consejero del ramo. De igual forma, se han tenido reuniones con afectados, intentando explicar el tema y tranquilizarlos en la medida de lo posible.
Desde el Ayuntamiento de Roquetas de Mar han querido hacer estas manifestaciones una vez que el delegado ha lanzado, según el Consistorio, "unas acusaciones inciertas y demagógicas sobre las competencias en vías rurales". Ante esto, el Consistorio ha afirmado con rotundidad que "no es competente para actuar en cruces viarios de ramblas situados en suelo rústico, por lo que le es imposible solucionar estos graves problemas". "Es más -continúan- ha sido en varias ocasiones en las que el Gobierno autonómico ha paralizado acciones municipales en estas zonas concretas, argumentando que sólo ellos eran competentes para realizarlas".

De igual forma, desde el Ayuntamiento han solicitado a la Junta de Andalucía que dé las explicaciones oportunas ante el cartel anunciador, precisamente en uno de los pasos afectados (concretamente el denominado Casablanca), en el que anuncia la 'Restauración, Corrección y Adecuación de Cauces de Andalucía', con un presupuesto de 24 millones de euros, financiado por la Unión Europea (UE), y en los que, hasta lo que conoce el Consistorio, en esta zona no se ha invertido ni un euro. Ésta es, han indicado, "la prueba evidente, primero, que es el Gobierno autonómico el encargado de realizar estas infraestructuras, y segundo, deberían explicar qué hace el cartel anunciador ahí instalado y qué presupuesto había para ese paso en concreto".

Después de conocer que la inversión ha sido de 13 millones de euros para una solución tan "burda" como es sólo tirar agua a la rambla, al Consistorio le gustaría conocer dónde han ido a parar y en qué se han gastado.

Las ramblas, han recordado, "son cauces naturales de evacuación para aguas pluviales, no para vertidos masivos como el que nos ocupa. Para poder realizar este tipo de desagües, hay que tomar las medidas oportunas que garanticen la seguridad de las personas, de las propiedades y, por supuesto, que no ocasionen un daño al medio natural y al ecosistema. La Junta no ha tomado en cuenta esta premisa fundamental y lo único que ha hecho es intentar solucionar un problema ocasionando otro y no tomando una decisión definitiva que no perjudique a nadie".

Ante la reiterada colaboración que se ha ofrecido a la Junta de Andalucía y no recibir respuesta alguna de la Consejería competente, salvo argumentos vanos de carácter político y demagógico, el Ayuntamiento de Roquetas de Mar ha anunciado que iniciará "las acciones legales que estime oportunas para intentar paliar la situación que están sufriendo los ciudadanos de nuestro municipio a causa de una decisión que no ha tenido en cuenta el perjuicio natural, de seguridad viaria, en propiedades y comunicaciones que está generando".