A los ya conocidos, como es el caso de Alemania o Bélgica, se ha sumado Oriente Medio, cuyos representantes en el Ifema quedaron sorprendidos por una calidad y un sabor que no esperaban.

Miguel Ángel Arenas, comercial del Consejo Regulador, resalta la importancia de continuar las negociaciones de modo que la marca IGP Tomate La Cañada sea reconocida a nivel internacional. A este respecto, ya han comenzado las negociaciones con los países interesados.

"Actualmente estamos trabajando con toda Europa, aunque también seguimos abriendo fronteras por todo el mundo, que es lo que pretendemos", asegura Arenas. "Aunque es Alemania la que más nos compra ahora mismo".

Los Países del Este también se encuentran bien posicionados en lo referente a las exportaciones de tomate. "Siempre nos han mostrado un interés creciente, nuestros tomates llegarían hasta Moscú. Por supuesto, que nos entusiasma la idea", señala el director comercial.

La crisis, aunque golpea el sector, no es una muralla infranqueable para trabajar con los tomates de la IGP ya que el producto cuenta, a su favor, con unas características que lo hacen único y lo han convertido en indispensable para quien quiera seguir la Dieta Mediterránea o llevar un estilo de vida. "Estamos intentando afianzar el trabajo lo máximo posible. Puedo asegurar que en estos momentos, el porcentaje es bueno".

De este modo, la valoración que se hace desde la IGP del tomate exportado es muy positiva, y dentro de la agenda de cada uno de los miembros del Consejo Regulador está el continuar incrementando el radio de acción por los diferentes países, a escala mundial.

La IGP Tomate La Cañada busca la consolidación de los clientes a nivel europeo, de modo que la marca siga siendo reconocida mundialmente.