Este balance positivo se hace especialmente importante dada la actual coyuntura económica global y la adversa climatología a la que agricultores y ganaderos han hecho frente a lo largo del pasado año.

Entre otros aspectos destaca el valor alcanzado por la producción vegetal en 2012, que se ha incrementado respecto al año anterior al superar los 8.000 millones de euros. En cuanto a los productos que han experimentado un mayor aumento en su valor, resaltan los hortícolas (siete por ciento más que en 2011) y el aceite de oliva (22 por ciento más en 2012). En cuanto a este último sector, los buenos resultados alcanzados responden en gran medida a la comercialización de una campaña récord.

Asimismo, también se ha observado un incremento en las frutas frescas y el vino, que han visto aumentado su valor en cerca de un seis por ciento y más de un nueve por ciento, respectivamente.