Ante esta situación, el secretario provincial de COAG ha afirmado que "estamos planteándonos qué medidas tomar" y ha asegurado que, al menos durante los próximos meses, "vamos a hablar mucho de gestión de residuos". Y es que, tal y como ha insistido, el de los restos vegetales es un problema que "afecta a todo el sector porque repercute tanto en nuestra imagen como en la propia sanidad vegetal".

Preguntado sobre la situación de las plantas que, actualmente, operan en la provincia, ha comentado que, en el caso del Poniente, "la planta de Ejido Medio Ambiente abre esporádicamente, debido a la saturación que tiene", mientras que, en lo que respecta a la planta de Albaida en La Mojonera, junto a esa misma saturación, "no aceptan plantas con rafia". Así las cosas, los productores se están viendo abocados a acumular los residuos "en las anchuras de los invernaderos", en el caso de que exista tal anchura. "Los transportistas no saben qué hacer con los restos y las matas se acumulan en los bancales", ha explicado.

Junto a esta opción, también hay "pastores que aceptan los restos pero, claro, teniendo en cuenta la cantidad que hay, escogen lo más atractivo para su ganado, que suelen ser los restos de melón y sandía", mientras que, "es más difícil que se hagan con restos vegetales de pimiento porque es un cultivo más leñoso y tiene rafia".

En última instancia, hay quien recurre a la puesta en marcha de medidas culturales, "pero esto es algo que no se puede generalizar", entre otras cuestiones, porque "tanto fabricar tu propio compost como triturar tus residuos y enterrarlos son prácticas que, según la Ley de Sanidad Vegetal actual, no están permitidas".