Esta diversidad de clientes requiere de un servicio personalizado y adaptado a las necesidades de cada uno de ellos y, por ello, "en Gasóleos Ferrer hemos acondicionado nuestros vehículos" y, así, "tenemos cinco camiones de distintos tamaños, desde 4.000 a 32.000 litros, para llegar a cualquier cliente". En cualquier caso, la mayor parte de esos clientes son "empresas que disponen de instalaciones con depósitos propios".

Gasóleos Ferrer ofrece combustibles de "máxima calidad", puesto que "compramos a compañías que son punteras en el sector y distribuimos el mismo combustible de calidad que ellas". La calidad de su producto y el servicio personalizado que ofrecen a sus clientes son dos de las claves que han hecho posible que, desde 1999, cuando la empresa comenzó a funcionar, hasta la actualidad, no haya hecho más que crecer.

Gasóleos Ferrer está ubicada en el Levante provincial, sin embargo, "tenemos clientes repartidos por toda la provincia". De este modo, Miguel Ferrer explica que en torno al 60% de su negocio se concentra en el Poniente, mientras que el 40% restante, aproximadamente, corresponde al Levante, gracias, sobre todo, "al crecimiento tanto empresarial como agrícola que se ha producido en la zona".

Por sectores, la agricultura es, si cabe, su principal cliente, aunque "los sectores industrial y la automoción también tienen un peso más que considerable". "La agricultura es uno de los sectores que demanda más combustible, sobre todo para calefacción y, por ello, es algo más estacional, mientras que, en el caso de la industria y la automoción, nuestro volumen de negocio se mantiene más estable", concluye.

En El Ejido
Para seguir ampliando la gama de servicios a sus clientes, Gasóleos Ferrer prevé gestionar muy pronto una gasolinera en El Ejido. De este modo, "intentaremos llegar también a los pequeños consumidores y, además, dar un mayor servicio a nuestros clientes". La empresa ya gestiona una gasolinera en Catell de Ferro, en Granada.

Isabel Fernández