A través de las mejoras en los materiales plásticos utilizados para contener alimentos, los técnicos de Andaltec trabajan para conseguir alargar la vida del producto sin que ello suponga usar aditivos que puedan contaminarlos. Los beneficios de los novedosos envases que está desarrollando el Centro Tecnológico del Plástico son numerosos. Por una parte, aportan una mayor seguridad al consumidor, ya que el alimento se conserva fresco más tiempo y en mejores condiciones. Por su parte, las empresas alimentarias consiguen reducir el coste de producción de sus envases y alargan el tiempo que sus productos pueden estar en el mercado.

El director de Proyectos I+D de Andaltec, Daniel Aguilera, recuerda que cada vez son más las firmas que operan en el sector de la alimentación que se decantan por el plástico para envolver sus productos. "El plástico es un material que presenta muchas ventajas para el sector de la alimentación y nosotros estamos colaborando estrechamente con varias empresas andaluzas para conseguir que sus envases sean mucho más que un contenedor de su producto. Queremos dotarlos de propiedades innovadoras que supongan un valor añadido de cara al consumidor", indica.

Andaltec es un centro tecnológico creado en el año 2005, impulsado por una treintena de patronos entre los que se encuentran importantes empresas del sector del plástico e instituciones públicas y financieras. El objetivo del Centro Tecnológico del Plástico, que posee una plantilla que se acerca al centenar de profesionales, es ayudar a las empresas del sector a mejorar su competitividad y productividad de forma sostenible, dando un valor añadido al producto a través de la innovación. El centro cuenta con una amplia y moderna sede en Martos (Jaén), donde dispone de la última tecnología en software y laboratorios para desarrollar proyectos de I+D+i.