El tomate se está viendo muy perjudicado, una campaña más por estas fechas, por la entrada de tomate marroquí a la Unión Europea (UE) a un precio inferior al fijado en el acuerdo comercial vigente entre la UE y el país alauita. Las organizaciones agrarias han hecho públicas sus quejas al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, para que exija a las autoridades europeas competentes en la materia que apliquen los aranceles estipulados para estos casos.

Por poner algún ejemplo de los precios de distintos tipos de tomate, el larga vida, calibre M, está cotizando a una media de 40 céntimos de euro el kilo, de primer corte, y está registrando unos remates incluso inferiores a los 20 céntimos. Poco mejor están siendo las cotizaciones de los tomates rama y pera, cuyos primeros cortes rondaban, el pasado jueves 7 de noviembre, los 56 céntimos de euro el kilo, en ambos casos, presentando un remate medio de 26 y 23 céntimos de euro el kilo, respectivamente.

Todo ello precedido, en el caso del tomate, por un mes, el de octubre, en el que esta fruta ha registrado, según han explicado desde ASAJA-Almería, un precio "un 55 por ciento inferior al del mismo mes de 2012, llegando a ser, en septiembre, hasta un 75 por ciento menor".

El producto estrella de la comarca del Poniente almeriense, el pimiento, tampoco se está librando de la crisis generalizada de precios en origen de las frutas y hortalizas locales. El tipo que peores precios está registrando es, sin lugar a dudas, el italiano, con precios que, en el caso del rojo no superan ni tan siquiera los 30 céntimos de euro el kilo, por lo que se encuentran muy lejos de los 57 céntimos de euro el kilo que son necesarios para que los productores cubran los costes de producción. Según ASAJA-Almería, los pimientos italianos "se vendieron en septiembre y en octubre un 30 por ciento más baratos que en los mismos meses del año anterior".

Tampoco están siendo positivos los precios de los pimientos morrón y California. Los primeros se vendieron el 7 de noviembre entre los 40 céntimos y 55 céntimos de euro el kilo, en el caso de los verdes, y entre 30 y 60, en el de los rojos. Respecto a los California, el que peores cotizaciones registra es el amarillo, que no pasa de los 30 céntimos de primer corte, mientras que los rojos cotizaron el pasado día 7 entre 32 y 48 céntimos los rojos y entre 54 y 58 los verdes, siempre en la subasta de Agroejido, en la ciudad de El Ejido.

Los pepinos francés y Almería superan a duras penas los 40 céntimos de euro el kilo de primer corte, mientras que el corto sí se está vendiendo, incluso, a 60 céntimos. Peor aún es la situación para la berenjena que, en el caso de la larga, continúa registrando unos primeros cortes en torno a los 40 céntimos de euro el kilo y unos remates de hasta 21 céntimos.

Excepción

De entre todas las frutas y hortalizas, el único producto que se ha salvado en los últimos días de esta situación ha sido, sin lugar a dudas, el calabacín, que comenzaba el pasado 31 de octubre a un primer corte de 91 céntimos de euro el kilo, en la subasta de Agroejido El Ejido, y remataba a 65 céntimos, y ha ido aumentando su cotización hasta venderse, en el mismo centro comercializador, a un precio que osciló, el jueves 7 de noviembre, entre 1,06 y 1,35 euros el kilo.

La menor producción de calabacín que se está produciendo, debido sobre todo a las plantas que han tenido que arrancar los productores a causa del devastador virus de Nueva Delhi mucho está teniendo que ver en estos precios.

La judía verde ha sido otro producto que, pese a no tener un precio elevadísimo, se ha mantenido en niveles aceptables durante los últimos días. Así, por ejemplo, siempre en la subasta de Agroejido de El Ejido, la perona larga se vendió entre 1,30 y 1,99 euros el kilo el 31 de octubre, precio que ha ido aumentando hasta oscilar entre 1,30 y 2,03 euros el 7 de noviembre.

Rafa Villegas