Según los datos aportados por los agricultores que han presentado solicitud de ayuda, la inversión necesaria para reconstruir las estructuras de los invernaderos ascendería a unos 7,5 millones de euros. A la espera del análisis de las solicitudes presentadas, y en base a la inversión estimada por los propietarios de los invernaderos, la ayuda global para la reconstrucción de las estructuras destruidas podría superar los 3 millones de euros.

         La consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha valorado el trabajo realizado por los funcionarios de la Oficina Comarcal Agraria, tanto en el análisis inmediato -a pie de campo- de los daños causados por el granizo, como por la labor de información y asesoramiento que han llevado a cabo con los agricultores afectados durante el periodo de presentación de las solicitudes de ayuda.

         En la segunda quincena de diciembre y la primera de enero -durante el plazo establecido para la presentación de las solicitudes-, personal de la Delegación Territorial y el jefe de Servicio de Modernización de Explotaciones de la Dirección General de Regadíos y Estructuras han mantenido varias reuniones con técnicos de las organizaciones profesionales agrarias y han asistido a encuentros con afectados para informarles de las ayudas, de los requisitos que deberían cumplir, de la documentación necesaria y la forma de tramitación de las solicitudes.

         Asimismo, funcionarios de la OCA han avisado telefónicamente a todas las personas que han presentado declaración de daños en la estructura de sus invernaderos para informarles de forma individualizada sobre la posibilidad de acogerse a las ayudas dispuestas por la Consejería; y en la propia oficina se han atendido las dudas planteadas por los agricultores y las organizaciones agrarias a la hora de cumplimentar las solicitudes de ayuda.

Compromiso con los agricultores

         Mediante esta iniciativa, se pone de manifiesto el compromiso del Gobierno andaluz con los agricultores almerienses, tal y como ha venido reiterando en numerosas ocasiones la consejera Elena Víboras. Un compromiso que se materializó desde el mismo día de la tormenta de granizo, con la puesta en marcha de un dispositivo para ayudar a los afectados, y con la aprobación por parte del Gobierno de la Junta de Andalucía de una línea de ayudas dotada con 5 millones de euros, que ha supuesto un gran esfuerzo, ya que se trata de un procedimiento complejo en el que ha habido que conjugar normativas europeas y estatales, y sin embargo, en un tiempo récord se ha logrado reducir al máximo los trámites y tiempos administrativos, con el fin de que las medidas sean verdaderos incentivos para los agricultores afectados.

         Estas ayudas se enmarcan en el Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2007-2013, y serán cofinanciadas con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y la Consejería. De acuerdo con los criterios establecidos, tendrán derecho a dichas ayudas los titulares de explotaciones cuya producción media anual en los tres últimos años se haya visto reducida en más de un 30% por adversidades naturales.

         El objetivo de estas ayudas es recuperar la capacidad productiva en esta superficie y, para ello, el Gobierno andaluz pone a disposición de los agricultores afectados estos incentivos que les permitan realizar cuanto antes las inversiones necesarias para recuperar el potencial productivo, muy importante para la provincia. Debido al carácter urgente de estas actuaciones, la Consejería decidió que se pudiera pedir el acta de no-inicio de los trabajos desde el mismo momento en que se presentara la solicitud, ya que el objetivo era facilitar la reconstrucción de los invernaderos cuanto antes y no perder la posibilidad de producir en esta misma campaña. Por ello, los agricultores que soliciten estas ayudas podrán empezar las inversiones rápidamente si así lo desean y recuperar parte de la producción de esta campaña, según apuntó en su día  la consejera.

        Ayudas y seguros agrarios

         De acuerdo con la regulación aprobada, el importe máximo de las ayudas no podrá superar el 40% del coste para un máximo de 100.000 euros de inversión por explotación. Asimismo, el máximo subvencionable será de 15 euros por metro cuadrado de cada invernadero. Además, recibir estas ayudas estará condicionado al compromiso de continuar esta actividad productiva durante cinco años para lo que se exige, entre otros requisitos, el aseguramiento de su explotación.

         Entre los criterios más valorados destacan ser titular de una explotación prioritaria, tener contratado un seguro agrario, formar parte de una entidad asociativa y que el porcentaje de superficie dañada sea superior al 50% del total.