El presidente ruso, Vladimir Putin, ha firmado este miércoles un decreto que contempla limitar o prohibir la importación de productos agrícolas y alimentarios procedentes de los países que han aprobado sanciones recientemente contra sus dirigentes y entidades, tales como los pertenecientes a la UE o Estados Unidos, que han sancionado a Rusia por el papel que ha jugado en el conflicto ucraniano. Estos vetos estarían en vigor, en principio, un año.

De este modo, y según ha explicado el propio Gobierno ruso, se pretende "garantizar la seguridad" del país, ya que su presidente considera "inaceptable" la utilización de sanciones como "instrumento de presión política".

Esta noticia resulta más que preocupante para el sector exportador no sólo almeriense, que ve en este país un mercado emergente más que interesante por su elevado número de consumidores y un poder adquisitivo al alza, sino también nacional. De hecho, ya este miércoles, desde FEPEX mostraban su "preocupación" por un "conflicto comercial entre la UE y Rusia" que "está afectando negativamente a las exportaciones españolas a este país", que es, a día de hoy, el principal mercado extracomunitario para los exportadores nacionales.

Según FEPEX, este cierre de fronteras a las exportaciones comunitarias puede provocar "excedentes en determinados países con mayor presencia en el mercado ruso" que el español y, como consecuencia, "perturbaciones en otros mercados muy sensibles a los desequilibrios de la oferta y la demanda".

El tomate es el producto español más exportado a Rusia, con más de 37.000 toneladas en 2013, seguido del pepino, con casi 14.400.