El día 8 de marzo de 1970 tuvo lugar la fundación de la Cooperativa San Isidro Labrador de El Ejido. 21 Agricultores que se reúnen al efecto en el salón parroquial, presididos por Gabriel Maldonado Moral, “iniciando un camino en donde cada uno aportó lo que tenía, que no era mucho, lleno de dificultades y contratiempos, pero que con inteligencia y dedicación han sido capaces de superarlos, logrando así, hacerse más fuertes tanto quienes continuaron en el viaje como quienes se unieron más adelante en esta gran aventura”, como ha explicado su gerente, José Antonio Brao.

Siempre es motivo de celebración el 45 aniversario de la fundación de una empresa, más aun, en estos tiempos de crisis económica donde se está produciendo el cierre de grandes, pequeñas y medianas empresas, y más si cabe, si se trata de una empresa perteneciente al sector agrícola, en crisis permanente. Así pues, había motivos para la celebración del 45 aniversario de la Cooperativa San Isidro, o mejor dicho, el éxito de la Cooperativa San Isidro, 45 años después de su fundación. El éxito del trabajo, el esfuerzo, la unión y de la solidaridad de los ejidenses. “El desarrollo de nuestro municipio no podría entenderse hoy en día sin las cooperativas, por lo que esta celebración debe servir de ánimo a todos nuestros vecinos”, ha añadido Brao.

La Cooperativa San Isidro es de las decanas del Poniente almeriense, se fundó en 1970 pero estos ya venían colaborando juntos como agrupación de labradores en el cultivo de la uva. Brao ha querido dejar claro que han realizado, “durante 45 años, un apasionado viaje lleno de trabajo, esfuerzo, dedicación y sacrificio para llegar a ser el grupo actual. Los comienzos no serían buenos, pues tendrían sus problemas tanto a favor como en contra, pero a pesar de todo, continuaron con esfuerzo, y paso a paso se ha llegado hasta hoy, donde con toda seguridad todo es más fácil”.

Así pues resulta indudable que la Cooperativa San Isidro va unida a este territorio y a sus particularidades, y su éxito, es el éxito de todo el municipio y de sus vecinos. “Por lo cual todos y todas nos tenemos que alegrar de este aniversario”, ha explicado Brao.

San Isidro, como se le conoce, es importante en cuanto al número de puestos de trabajos directos e indirectos que genera, y una de las principales en cuanto a volumen, con 30 millones de kilos. Aparte de la capacidad de los socios para producir, hay una particularidad, y es, como ha dejado claro Brao, “la calidad de sus marcas comerciales, aplicando exigentes criterios en todos y cada uno de los procesos que se suceden desde antes que el agricultor empiece la siembra hasta la cosecha es vendida y entregada a nuestros clientes”. Prueba de ello es que esta campaña, junto al resto de certificaciones de calidad que ya poseen, han recibido la certificación Grasp de todos sus socios, la cual garantiza las buenas prácticas sociales con todos sus trabajadores y es de destacar porque es, ajuicio de Brao, “un elemento que la diferencia y un hecho que le da valor añadido, es la profesionalidad y fidelidad de sus agricultores tanto de muchos que son segunda generación de fundadores como los nuevos que se vienen incorporando”.

 

Sin todo esto, no dejaría de ser una cooperativa más. En cuanto a sus cifras, la Cooperativa San Isidro Labrador de El Ejido cuenta con 160 socios, 300 hectáreas, 200 puestos de trabajo directos, 30 millones de kilos (90% destinado a la exportación, principalmente Centroeuropa), 10 millones de kilos de pepino, 10 millones de kilos de pimiento, 2 millones de kilos de calabacín, 2,5 millones de kilos de berenjena, así como 5,5 millones de kilos de melón y sandía. Estas son las cifras del éxito de la Cooperativa.

Pese a las buenas cifras, Brao ha asegurado que “no son tiempos para darnos por satisfechos, tenemos un duro trabajo, para seguir generando riqueza y puestos de trabajo tan necesarios en estos momentos y somos conscientes de que lo que era válido y suficiente hace medio siglo no tiene nada que ver con lo que es necesario en el siglo XXI. Hoy el mundo es un medio más hostil debido principalmente a la globalización. Todos somos más globales y encima no hay forma de evitarlo”.

“Con las nuevas tecnologías lo que antes estaba lejos ahora está cerca, lo que tardaba días, semanas, meses o años hoy es inmediato, lo que afecta a los demás ahora nos afecta a todos. Ya nada ni nadie queda exento o a salvo de las decisiones y actos de personas, empresas, organizaciones mercados y gobiernos de cualquier parte del mundo”, ha añadido Brao.

Para Brao, ante esta situación la solución pasa por el “cooperativismo, esta fórmula sí sigue siendo válida, porque nos aporta seguridad, rentabilidad, calidad, profesionalización y adaptación”.

En la actualidad los productores agroalimentarios están sometidos, como a lamentado Brao, “a la dictadura de las grandes empresas distribuidoras, las cuales han roto las reglas en la formación de la cadena de valor. Estas empresas que están situadas al final de la cadena de distribución imponen precios de venta a sus proveedores, los cuales a su vez tiene que trasladar unos precios ridículos al resto de eslabones de la cadena hasta llegar al primer eslabón, en el que estamos nosotros soportando precios que merman considerablemente la rentabilidad de las explotaciones. Precios muchas veces por debajo de los costes de producción”.

En este sentido, Brao considera que lo justo y lo que es necesario conseguir es “crear el precio desde la base, desde el productor. Debemos estar abiertos a los cambios actuales, es nuestro reto y todos debemos ser parte, el presente y el futuro son grandes desafíos que deberemos encarar con  firmeza, con visión estratégica, planeamiento y mayor comunicación; pero siempre teniendo en cuenta que el objetivo de nuestra cooperativa no es buscar sólo el mayor excedente, sino también el desarrollo del ser humano en el ámbito de igualdad, justicia, respeto, honestidad y trabajo conjunto”.

La Cooperativa San Isidro Labrador de El Ejido cuenta con el personal y la experiencia para activar sinergias que les permitan transitar hacia una mejor organización y consolidar su eficacia. “La competencia interna puede ser positiva, si el objetivo general se fortalece, pero no lo es si predomina el interés individual”, ha explicado Brao.

Modernización

La Cooperativa San Isidro Labrador ha iniciado un proceso de modernización con la revisión profunda de sus actuales prácticas para conservar sus fortalezas y atajar sus debilidades, con la pretensión de contar con los servicios de consultorías externa especializadas que les ayuden a desarrollarse como organización, buscando la excelencia.

Entre las actuaciones realizadas esta campaña en el centro de manipulado, situado en  la carretera Pampanico-La Aldeilla, cabe destacar la inversión en la instalación de una nueva línea de manipulado para pimiento que duplica la producción y la calidad, así como el desarrollo de la marca COPISI, con un monte total de inversiones como OPFH de 1,2 millones de euros. 

Desde la Gerencia y el Consejo Rector de la Cooperativa San Isidro Labrador de El Ejido han querido felicitar a través de la web y el periódico de fhalmería “a todos los socios y socias, a los trabajadores y trabajadoras, al actual Consejo Rector y a su presidente, Rosendo Pozo, por este cuarenta y cinco cumpleaños, a la labor de todos los que ocuparon su lugar en estos años y, muy especialmente, a los valientes veintiún socios fundadores, que se atrevieron a poner en marcha esta Cooperativa, y más allá de las dificultades, porque las hubo, pero con los valores del esfuerzo, el trabajo, la unión, y la solidaridad, haber llegado hasta aquí, completando este camino de éxito, y siendo un elemento clave en la vertebración y cohesión social de nuestro pueblo. Estos valores, tienen que seguir estando presentes en el día a día de la Cooperativa, pues solo así, podremos celebrar más años. Debemos estar orgullosos de lo que nos han dejado”.