De hecho, la diferencia de precio entre origen y destino es de más de 10 euros el kilo, unas cifras disparatadas que provocan que el sector agrícola esté desequilibrado comercialmente.

No muy lejos del calabacín se encuentra la berejena, cuyo diferencial porcentual se encuentra en el 548 por ciento, ya que el precio en origen de esta hortaliza es de 0,25 euros el kilo, mientras que el de destino es de 1,62 euros.

Los productores de pepino también se encuenra en una situación de preocupación en estos momentos, puesto que el precio que ellos están recibiendo por un kilo de pepino es de 0,24 euros, mientras que el consumidor lo está pagando a unos 1,63 euros el kilo, por lo que la diferencia de precio es bastante clara y llega a superar los 6 euros.

Finalmente, el melón también es de destacar, ya que su diferencia porcentural llega a ser de 467%, puesto que el precio en origen está en 0,36 euros, mientras que en destino llega a superar los dos euros el kilo.

Sin duda, una vez más, el sector hortofrutícola se encuentra en una situación complicada, ya que no está siendo justa ni para el agricultor ni para el consumidor.


E. S. G.