En declaraciones a los medios, tras el Consejo de ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea celebrado en Bruselas, la ministra ha explicado que junto con la prórroga de las medidas extraordinarias para el sector hortofrutícola, la Comisión ha aceptado incluir el melocotón y la nectarina, que era una prioridad para la delegación española. Una medida que se planteará el próximo jueves en una reunión de un grupo de trabajo de la Comisión Europea.

Por lo que respecta al sector lácteo, Garcia Tejerina ha dicho que la Comisión, además de comprometerse a prorrogar las medidas de almacenamiento privado  y de  intervención, atenderá la petición española de analizar, en el marco del observatorio del mercado lácteo  no sólo los precios, sino también los márgenes.

A estas medidas extraordinarias, la ministra ha recordado que se  sumarán las anunciadas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para el sector lácteo por valor de 11 millones de euros. Estas medidas incluirán el apoyo a la constitución de las organizaciones de productores de ámbito supraautonómico,  con una dotación de un millón de euros, así como una  campaña de promoción, a la que se destinará un presupuesto de un millón y medio de euros.

Además, ha explicado la ministra, se destinarán 1.600.000 euros para financiar  avales de solicitudes de créditos, para ganaderos de vacuno de leche, por un importe de hasta 35 millones de euros.

El paquete de medidas incluirá también una estrategia nacional de leche en las escuelas, para favorecer el consumo escolar, con una dotación de 6.9 millones de euros. A estas cantidades, ha  apuntado García Tejerina, habrá que sumar lo que las Comunidades Autónomas decidan en sus programas de Desarrollo Rural.  En este sentido, ha señalado la ministra, se celebrará una reunión esta misma  semana, para trabajar conjuntamente de forma que las decisiones sean sinérgicas con las medidas adoptadas por el Departamento.

Finalmente ha recordado que el Consejo de Ministros del pasado viernes aprobó la posibilidad de que los ganaderos que tuvieran que hacer frente a la tasa láctea pudieran realizar los pagos de forma escalonada en tres años.