Ortiz ha valorado la labor que realizan estas empresas, "ya que procuran resolver con sus nuevas variedades, las demandas que tienen los agricultores en el proceso de producción de hortalizas y las comercializadoras para satisfacer las tendencias de los consumidores".

La consejera ha destacado que estas demandas están relacionadas con la resistencia a enfermedades, mejora de la productividad, diversidad de tamaños y colores o un mejor sabor para las hortalizas frescas. "Por ello", ha afirmado, "es muy importante que la agricultura puntera de Almería asuma estos retos y avances en el uso de semillas y material vegetal certificado y de calidad".

Ortiz ha señalado que junto a este "sector en expansión" destaca en Almería el de los semilleros, compuesto por 46 empresas que llegan a producir unos mil millones de plantones de hortícolas de pimiento, tomate, pepino, melón, sandía, berenjena, calabacín, judías verdes y lechuga. Como ha explicado la consejera, todas estas empresas están obligadas a comercializar sus productos debidamente certificados por Control Oficial.

Además de este sistema, que garantiza que el proceso de producción, precintado y etiquetado del material adquirido cumple los requisitos técnicos, Ortiz ha explicado que la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha puesto en marcha un procedimiento de 'autocertificación', a través de una herramienta informática de Gestión de Semillas y Plantas de Viveros, que agilizará el proceso e implicará a las empresas en el compromiso de incrementar sus estándares de calidad internos.

Un sector en expansión en Almería
La agricultura supone en torno al 20% del PIB de la provincia de Almería. El 90% del valor de producción agraria de la provincia proviene de las hortalizas. A nivel regional la horticultura almeriense aporta casi un 60% de la producción hortícola andaluza. El valor de la producción asciende a más de 1.900 millones de euros; el valor de la comercialización a más de 2.500 millones de euros y las exportaciones a más de 2.200 millones de euros

El sector hortofrutícola de Almería invierte entre un 10% y 20% de sus ingresos en la obtención de variedades, que en algunos casos llega a alcanzar el 30%. Las empresas de semillas facturaron el año pasado en esta provincia unos 150 millones de euros y lanzó al mercado más 250 variedades.

Dentro de este sector de actividad, destacan los semilleros, que son empresas de servicios destinadas a la producción de plántulas de calidad a partir de semillas, con las debidas garantías vegetativas y fitosanitarias. En Almería hay 46 empresas que cuentan con 66 establecimientos y que facturan en torno a 50 millones de euros anuales. Estos semilleros producen unos 1.000 millones de plantones, en torno a la mitad de ellos de hortalizas de hoja y aire libre (principalmente lechugas, escarolas y crucíferas), seguidas de pimiento (unos 170 millones), tomate (140 millones), melón (26 millones), sandía (20 millones), berenjena (9 millones), calabacín (3 millones) y pepino (3 millones).

El gasto en semillas y plantas que realizan anualmente los agricultores de cultivos protegidos de Andalucía se encuentran por encima de 1.000 euros por hectárea, según el Estudio de Costes y Rentas de las Explotaciones Agrarias de 2014 del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. El cultivo con un coste mayor en semillas y plantas es el tomate, que supera los 8.000 euros por hectárea, mientras que el pimiento llega a 5.000 euros y el pepino a cerca de 4.000 euros por hectárea, representando en estos casos más del 12% de los costes totales de producción.

Visita a Semillas Fitó
Posteriormente, la consejera ha realizado una visita organizada por la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (Anove) a las instalaciones que la empresa Semillas Fitó tiene en Almería. Semillas Fitó es una empresa multinacional española fundada en 1880 y dedicada a la mejora genética, producción y distribución de semillas de especies de plantas agrícolas y hortícolas.

En su trayectoria destaca su esfuerzo en la investigación y obtención de nuevas variedades desde 1970 y la implantación de técnicas de biotecnología como herramienta para ganar tiempo y precisión en la mejora varietal tradicional y nueva vía para desarrollar y patentar tecnologías en 1990. Un 15% de su facturación está dedicada a la mejora genética y al desarrollo de nuevas variedades bajo conceptos y equipamientos científicos de vanguardia.

Todas las fotos de la jornada, aquí.