Gracias a ello, ha subrayado Ortiz, se prevé movilizar "una inversión de más de 271 millones de euros, con la que se espera consolidar los más de 17.000 empleos de las empresas beneficiarias", además de ayudar a la creación de 2.700 nuevos puestos de trabajo.

Estas ayudas, que tienen como objetivo promover la innovación y mejora de la competitividad del sector agroalimentario, han tenido una acogida extraordinaria, "una clara muestra de la voluntad de estas personas, decididas a mejorar y apostar por sus iniciativas, por lo que merecían un respaldo como el que les hemos dado", ha resaltado la consejera.

Estos incentivos se dividen en líneas de ayudas dirigidas a Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), a grandes empresas y a actuaciones específicas en el sector del olivar. En el primer caso, el montante se ha ampliado de 17 a 51,2 millones de euros; para las ayudas a grandes empresas, la asignación presupuestaria aumenta de 9,1 a 27,5 millones de euros; y en proyectos específicos en el sector del olivar y la aceituna de mesa, el montante se incrementa de 11,1 a 29,3 millones de euros.

Entre otras actuaciones, se respaldan aquellas dirigidas a fomentar el aumento de la dimensión de las empresas, apoyar la diferenciación y comercialización de sus producciones, contribuir a asegurar la calidad y trazabilidad, o abrir el sector a nuevos mercados y estrategias de comercialización.