La presencia de mosca blanca y virus de Nueva Delhi marcan los primeros meses de campaña

En Níjar y La Cañada se han llegado a arrancar un centenar de hectáreas de tomate mientras que, en el Poniente, la principal preocupación se centra en la virosis que afecta al cultivo de calabacín.

El inicio de la campaña agrícola de otoño ha estado marcada, hasta el momento, por la alta presencia de mosca blanca y, consecuentemente, con la extensión de virosis que han desencadenado, incluso, el arranque de plantaciones en varios puntos de la provincia almeriense.

Según explicó a FHALMERIA, Andrés Góngora, secretario provincial de COAG Almería, durante los meses de septiembre y octubre la zona de Níjar, El Alquián y La Cañada ha sido la más afectada. “Allí la situación de virosis ha sido bastante importante en tomate y ha habido que arrancar plantaciones. Estimamos que habrán sido unas cien hectáreas las que se han tenido que arrancar”, indicó Góngora. A ello se suma que casi todas las explotaciones de tomate de esta zona de la provincia tienen un índice de virosis que hacen que no puedan estar produciendo como deberían. “Aunque no hayan arrancado, hay entre un 20 o 25 por ciento de plantas que están afectadas, con lo que hay una parte del invernadero que o no produce o lo hace por niveles inferiores de lo que cabría esperar”, apuntó.

El secretario provincial de COAG Almería se mostró algo optimista acerca del retroceso de la plaga de mosca blanca en las próximas semanas. Así, recordó que “el problema es que las variedades antivirus pierden las tolerancias cuando hace mucho calor y, por ello, con las temperaturas que estamos ya alcanzando debería funcionar mejor”. De esta forma, desde la organización agraria confían en que con la bajada de temperaturas y ante la fuerte presencia de variedades resistentes el cultivo de tomate, al menos, se estabilice en esta zona de la provincia.

“Los datos también nos demuestran que se ha reducido algo la lucha biológica en tomate y eso puede ser una circunstancia a tener en cuenta; habrá que analizarlo”, indicó Góngora. En este aspecto, también opinó que “en control biológico lo que falta son nuevas herramientas ante la aparición de nuevas plagas que estaban adormecidas y que están volviendo a verse en el campo”.

Calabacines

Por lo que se refiere al Poniente, Andrés Góngora también indicó que entre los agricultores hay preocupación por la presencia, una campaña más, del virus de Nueva Delhi, “que está en los niveles del año pasado, lo que ya fue fuerte”, matizó. “No se consiguió erradicar y no hay variedades resistentes por lo que todas las variedades se ven afectadas, lo que puede ser grave”, continuó el secretario de COAG Almería. Góngora puntualizó que “los vaivenes de precios tienen que ver, en muchas ocasiones, con este virus”.

En cuanto al pimiento, el virus del spotted y la araña roja están dando también algunos quebraderos de cabeza al agricultor, según apuntó Andrés Góngora.

Almudena Fernández