Sánchez Haro ha destacado la provincia de Almería como referente en los mercados europeos por la calidad y sostenibilidad de sus productos agroalimentarios, que aportan alrededor del 40% del PIB y unos 110.000 empleos directos e indirectos. En cuanto a la producción hortícola, ha recordado que ésta supone más del 60% de la producción andaluza con casi 3,7 millones de toneladas de frutas y hortalizas y una comercialización de más de 3.150 millones de euros, mientras que con respecto a la exportación ha resaltado que se ha alcanzando un nuevo récord en frutas y hortalizas con 86 millones de euros, "el mejor septiembre de la historia".

En cuanto a los retos actuales de la agricultura almeriense, el consejero ha indicado que el agua es una materia que supone un compromiso de primer orden del Gobierno andaluz y, en este sentido, "debemos ser responsables y consecuentes para juntos reducir el déficit hídrico de Almería". Ha señalado que desde la Junta de Andalucía se están poniendo en marcha inversiones tanto en depuradoras como en regadíos, pero ha insistido en que es necesario que desde Almería se reivindique que se lleven a cabo las infraestructuras necesarias en la provincia para que los regantes puedan disponer de todos los recursos posibles. En este sentido, están pendientes de ejecución obras de interés general como las depuradoras de Adra, El Ejido o Roquetas, además de desaladoras como la de Villaricos, en Cuevas de Almanzora, en desuso desde 2012 tras resultar dañada en una riada.

Estas intervenciones, ha indicado, aportarían alrededor de 100 hectómetros cúbicos, cantidad que se incrementaría hasta los 150 si, además, se ponen al 100% de su capacidad las desaladoras que hay en la provincia, con lo que se paliaría en gran medida un déficit hídrico que se cifra en 179 hectómetros cúbicos.

Por otro lado, Sánchez Haro también ha apuntado la necesidad de mejorar la productividad, "producir más con menos recursos", y para ello desde la Consejería de Agricultura se han puesto en marcha medidas para la modernización de invernaderos (con 20 millones de euros) o la modernización de explotaciones, con 109 millones de euros. El consejero ha precisado que Almería es la provincia con mayor importe de ayuda propuesta, con más de 15 millones de euros para un total de más de 318 beneficiarios provisionales.

Ha explicado que esta mejora de la productividad debe ir acompañada de inversiones en I+D, para lo cual se han puesto en marcha unos incentivos para la creación y el funcionamiento de Grupos Operativos de Innovación con casi 7,5 millones de euros puestos a disposición. Y en cuanto al liderazgo, el consejero ha indicado que es necesario organizar la oferta, avanzar en el equilibrio de la cadena de valor, utilizar los mecanismos de retiradas en momentos de crisis de los mercados y avanzar en la planificación de las producciones o en transparencia en los mercados. Respecto a este tema, Sánchez Haro ha destacado que el papel desempeñado por Asaja, junto a otras organizaciones agrarias, ha sido determinante para hallar indicios de pactos ilícitos o fraudulentos, que serán investigados por Competencia tras la denuncia realizada el pasado mes de febrero.

Asimismo, el consejero ha incidido en que, para seguir creciendo en calidad, innovación, sostenibilidad y valor añadido, "queremos fomentar la colaboración entre todos los actores de la cadena agroalimentaria". En esta línea, ha resaltado que "cada vez más la distribución está llegando a acuerdos con los productores locales para el suministro de productos, para crecer juntos y alcanzar nuevos destinos".

En su intervención, Sánchez Haro ha señalado que "no sólo debemos crecer en dimensión sino también en valor, y uno de los principales instrumentos para ello son los Programas Operativos". Almería es la provincia que más se beneficia de estas inversiones, con más del 60% del total de Andalucía. En la última anualidad, ha alcanzado los 41,1 millones de euros para las 31 Organizaciones de Productores solicitantes.

Por último, el consejero ha destacado que otro de los retos del sector agroalimentario es avanzar en la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, algo que en el Gobierno andaluz ya se ha iniciado de manera firme no sólo a través de criterios de priorización de los incentivos, sino también con la puesta en marcha del I Plan de Igualdad en el sector agroalimentario y pesquero. Por ello, ha mostrado su apoyo a las iniciativas de Asaja Almería para impulsar la participación de la mujer en el sector agrario.