Carmen Vidal, Secretaria General de UGT Almería, asistió el pasado día 27 de febrero a la reunión que tuvo lugar en Murcia para firmar el documento por el que, desde el Círculo del Agua, se reclama al Gobierno y a los partidos políticos que den una solución definitiva que acabe con los problemas históricos de escasez de agua en esta zona de España, ante la gravísima situación de déficit hídrico que vive el Levante español y que amenaza con destruir el sector agrícola.

Con la firma de dicho documento, los integrantes de este movimiento quieren evitar que nuestros territorios se conviertan en un desierto y que se pierden los miles de empleos que mantienen viva la Huerta de Europa. Para ello, se necesita la actuación de las Administraciones en cuatro puntos clave:

- Apertura inmediata de las baterías de pozos de la Cuenca del Segura para paliar la falta de agua.
- Riego de socorro con recursos externos a la Cuenca Hidrográfica del Segura: están en juego millones de árboles frutales en todo el levante.
- Exigencia al Gobierno de España de que las nuevas tarifas del trasvase Tajo-Segura se realicen por cada metro cúbico de agua consumido.
- Puesta en marcha de todas las propuestas recogidas en el "Manifiesto Levantino por el Agua", hecho público el pasado 31 de octubre de 2017 (apoyado, de momento, por las Cortes Valencianas, la Asamblea Regional Murciana, la Diputación de Alicante y por más de 25 grandes ayuntamientos), y que van destinadas a garantizar la  perdurabilidad del Acueducto Tajo-Segura, la máxima producción de las desaladoras existentes en nuestros territorios, la ejecución de obras hidráulicas que garanticen el acceso al agua en condiciones de igualdad y la implementación de una tarifa de regadío y hogares justa y proporcionada en toda España.

Por último, según Carmen Vidal "sorprende que, aunque el Decreto de Sequía fue aprobado en mayo del año 2015, tres años después todavía no se hayan llevado a cabo las actuaciones necesarias y vitales que garanticen la supervivencia de la agricultura almeriense". Además, según Vidal, es necesario que se elimine el "tasazo" del trasvase Tajo-Segura, ya que la Administración, en lugar de asegurar el agua para producir alimentos, exige el pago de unos 4 millones de euros anuales a los regantes por un agua que no reciben.