CASI y la UAL abanderan el compromiso con la sostenibilidad del sector agrícola

El Aula de Sostenibilidad de la Universidad de Almería (UAL) realizó su primera actividad el pasado 30 de octubre con el desarrollo del Foro de Agricultura Sostenible, organizado por CASI, la propia UAL y la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía.

En el foro se debatieron los retos ambientales que ha de afrontar la agricultura intensiva de la provincia almeriense con ponentes expertos tanto del sector hortofrutícola como profesores de la UAL y representantes de la Junta.

Durante la inauguración del Aula de Sostenibilidad de la Universidad de Almería, el presidente de CASI, Miguel Vargas, habló de la necesidad de "concienciar y hacer partícipes a todos de la preocupación social por el problema medioambiental". A su juicio, "entre todos podemos buscar las soluciones" y se mostró convencido de que "este foro ayudará a encontrar soluciones".

La apuesta por la sostenibilidad es uno de los compromisos de CASI, comercializadora que celebrará el próximo año sus 75 años de historia. Vargas recordó que "Almería siempre ha sido pionera a la hora de adaptarse a los nuevos retos. Hace poco tiempo, pensar que podíamos sacar adelante nuestras explotaciones con fauna auxiliar era impensable, hoy es una realidad". El presidente de CASI dejó claro que "se puede producir aún más sano, que es lo que demanda la sociedad, no ya por moda o por legislación, sino por concienciación de todos de que es necesario".

Para concluir, Vargas instó a "no utilizar más recursos de los necesarios, ya que las generaciones venideras también van a necesitar hacer uso de los mismos".

El ciclo de conferencias dio comienzo a continuación de la mano del gerente de CASI, Antonio Domene, quien habló de los ‘Retos ambientales de la agricultura intensiva". Domene identificó como necesidades la disponibilidad hídrica, la gestión de residuos, una mayor producción con control biológico y en ecológico, la disminución de la utilización de químicos, así como una comercialización con una menor huella de carbono, utilizando transportes alternativos. A ello sumó otros retos como la utilización de envases biodegradables o una disminución del consumo de plásticos. Además, Domene hizo hincapié en la necesidad de llevar a cabo una mejora ambiental de los espacios agrícolas y, no menos importante, saber comunicar los avances conseguidos.

Uno de los problemas a los que se enfrenta el campo almeriense y que muy bien describió el gerente de CASI es el aumento de la competencia. Y es que, como explicó, "la bajada del coste de la tecnología y el cambio climático están propiciando más competidores para Almería". Es más, Domene dejó claro que "el ‘Modelo Almería' es el mejor, pero eso hace que lo copien, por lo que hay que seguir avanzando para mantenernos en cabeza".

Son muchos los motivos por los que se hace necesario invertir en sostenibilidad. Para Domene, "lo debemos hacer por nosotros, por nuestros hijos, por nuestros cultivos; por el planeta y sus pobladores vegetales y animales; por el mantenimiento de los recursos limitados; por las cadenas de distribución y los mercados; así como por los consumidores".

‘El modelo agrícola almeriense: pasado, presente y futuro'

El catedrático de Historia e Instituciones Económicas de la Universidad de Almería, Andrés Sánchez Picón, fue el encargado de recoger el testigo a Domene en el ciclo de conferencias. Su intervención versó sobre ‘El modelo agrícola almeriense: pasado, presente y futuro', una retrospectiva del sector para ver su origen y su enorme evolución.

El profesor identificó cuatro etapas fundamentales de la agricultura de la provincia desde el siglo XIX. En concreto, habló de una primera, que va del año 1850 a 1920, en la que se produjo un crecimiento del regadío tradicional en una agricultura de base orgánica. La segunda etapa la situó entre los años 1920 y 1950 con el bloqueo de la expansión del regadío tradicional y la transición hacia una agricultura industrial. La tercera etapa, de 1950 a 1990, la identifica por la mecanización del regadío y la realización de las grandes infraestructuras hidráulicas, mientras que desde 1990 hasta el año 2000 habla de una fase madura del regadío, con gestión de la demanda y debate hidráulico.

Una de las peculiaridades que destacó Sánchez Picón de la agricultura de regadío almeriense es que, al contrario que el resto de provincias andaluzas, a excepción de Huelva, donde predomina el aprovechamiento de aguas superficiales, la provincia de Almería se nutre, sobre todo, de aguas subterráneas.

Haciendo un poco de historia, el catedrático de la UAL recordó cómo "el primer triunfo de la especialización tuvo lugar durante el siglo XIX y el primer tercio del siglo XX con la uva". De esta fruta, como explicó, "se llegaron a exportar 50.000 toneladas justo antes de la I Guerra Mundial". Además, lamentó que "el fin de su cultivo comprometió a distintas comarcas de la provincia".

Otro hecho destacable de la historia reciente de la provincia que resaltó el profesor Sánchez Picón fue que "hasta 1980 Almería se había caracterizado siempre por tener un saldo migratorio negativo, es decir, más emigrantes que inmigrantes, mientras que a partir de esa fecha se tornó positivo, fruto del milagro económico almeriense".

En cuanto a los factores que hicieron posible ese salto económico en la provincia, el catedrático de la UAL hizo especial referencia a la actuación pública por parte del Instituto Nacional de Colonización, así como a los recursos humanos ya que, como explicó, "se trata de una actividad intensiva en trabajo humano, siendo un modelo endógeno, totalmente nuestro". A ello sumó, como es lógico, "las condiciones naturales y la respuesta emprendedora e innovadora del campo, así como la apertura de los mercados con la integración en la Unión Europea y, por supuesto, al clúster o sistema productivo local que se ha creado alrededor de la agricultura en la provincia.

Sánchez Picón achacó el menor crecimiento del sector hortofrutícola almeriense a que "hemos alcanzado la madurez, si bien si crecen con más brío las exportaciones, exportándose ya, según los datos de 2017, el 76,2 por ciento de lo que se produce".

Otras conferencias

A continuación llegó el turno de Francisco Javier Egea, profesor de Química Analítica de la UAL, quien abordó la temática de la ‘Economía circular en la agricultura intensiva'.

Egea quiso destacar un dato muy importante como es que "en ningún lugar del mundo existe tanta concentración de laboratorios de primera como en la provincia de Almería". Además, también resaltó que "la zona se ha convertido en un auténtico Silicon Valley de las semillas, con muchos genetistas trabajando aquí".

En cuanto a los retos del sector, a su juicio cabe destacar la gestión de residuos como subproductos que generen valor, empleo y una imagen de actualización de la agricultura; la modernización de las estructuras, incorporación de tecnologías de la información y la comunicación a todas las etapas de producción y comercialización; una mayor eficiencia en ahorro de insumos; así como un análisis del ciclo de vida y puesta en valor de las fortalezas.

Como muestra de lo que se puede hacer con los restos vegetales, Egea mostró la imagen de un vestido de alta costura, valorado en 18.000 euros, realizado a partir de biomasa agrícola.

La jornada continuó con conferencias tan interesantes como la de Juan José Amate Ruiz, director de Sostenibilidad a medida, quien señaló las claves para que la agricultura almeriense diseñe su propio modelo de sostenibilidad.

El secretario general provincial de la Delegación de Agricultura, José Antonio Aliaga, por su parte, centró su conferencia en la ‘Gestión de residuos agrícolas', uno de los principales problemas que afronta el sector en la actualidad.

El consejero delegado de COEXPHAL, Juan Colomina, por su parte, hizo un repaso por los ‘Aspectos ambientales de la horticultura de invernadero', mientras que Javier Cabello, profesor de Botánica de la UAL centró su conferencia en la ‘Biodiversidad y servicios ecosistémicos: beneficios para la agricultura'.

María Estefanía Rodríguez Navarro, de IFAPA-La Mojonera realizó una ponencia más técnica, centrándose en ‘Entomofauna de interés agrícola asociada a la vegetación autóctona'.

Los tres últimos conferenciantes del foro fueron Jesús Casas, catedrático de Ecología de la UAl, que abordó la temática de las ‘Prácticas agroambientales en las balsas de riego'; Juan José Vázquez, gerente de Wise Agrotecnología, que habló del ‘Uso eficiente del agua en cultivos intensivos'; así como Rafael Alonso, gerente de Oro del Desierto, que habló de ‘Buenas prácticas para una agricultura sostenible: experiencia de la empresa Oro del Desierto'.

Rafa Villegas

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