Agrobío consolida sus soluciones de control biológico para un cultivo sano y libre de residuos

La empresa almeriense dispone de un equipo técnico experto y especializado en insectos beneficiosos, polinización con abejorros y protocolos de manejo tanto en cultivos convencionales como producción ecológica.

Las hectáreas de cultivo de pepino que confían en el control biológico como estrategia para combatir las plagas sigue aumentando. Comienza la campaña de ciclo largo y Agrobío lidera y consolida un protocolo eficaz, con ácaros depredadores de excelente calidad y un asesoramiento técnico especializado.

De esta forma, una campaña más, los agricultores vuelven a apostar por A. swirskii o T. montdorensis de Agrobío alimentados con sus respectivas presas, Powermite y Powerfood, directamente sobre la planta para proteger sus cultivos desde el inicio, especialmente en cultivos sin polen y en aquellos donde se precisa una instalación temprana, antes del inicio de la floración.

Este interés por parte de los agricultores posiciona al control biológico como herramienta fundamental para obtener productos libres de residuos, que cumplan los estándares de calidad más exigentes.

Asesoramiento

Desde Agrobío han recalcado su interés por aportar soluciones a los productores. "Es esencial que el agricultor tenga herramientas que le permitan obtener frutos sanos y seguros y que se encuentre bien asesorado en el proceso. En Almería, sureste de la península, y cada vez en más zonas del territorio español, existe un amplio conocimiento sobre control biológico, con agricultores experimentados en el uso de estas técnicas y siempre abiertos a integrar las nuevas herramientas en manejo de fauna auxiliar", han señalado desde la empresa.

En este sentido, Agrobío dispone de un equipo técnico experto y especializado en insectos beneficiosos, polinización con abejorros y protocolos de manejo tanto en cultivos convencionales como producción ecológica, que trabaja a pie de campo para dar el asesoramiento adecuado, tanto en hortícolas como ornamentales, frutales, parques y jardines e incluso plagas forestales.

Nuevos retos

En muchos cultivos, el control biológico solo necesita un impulso para hacer frente a las plagas, y, en este sentido, en esta empresa almeriense han experimentado un repunte del uso de Nesidiocoris en semillero como parte fundamental de la estrategia contra la Tuta absoluta "y ya estamos viendo resultados en los cultivos de tomate donde se han aplicado estas técnicas impulsadas por Agrobío", indican.

En cambio, en otros cultivos se enfrentan al resto de plagas que han cobrado importancia como la araña roja o el pulgón; este último, sobre todo en cultivo orgánico. Para ello, Agrobío también desarrolla proyectos que permiten establecer protocolos de trabajo basados en el control preventivo y el establecimiento precoz de auxiliares, con su PLANTAcontrol biopropagada de Lobularia+Orius y plantas de cereal, que darán refugio y alimento a los depredadores y parasitoides.

No obstante, Agrobío continúa desarrollando estrategias innovadoras que permitan el establecimiento temprano de los insectos beneficiosos y conseguir altas poblaciones de ácaros depredadores sobre el cultivo, con novedades en sus formulaciones, la alimentación e incluso la suelta mecanizada, que permite una mejor instalación y dispersión del insecto y su alimento, a la vez que ahorra tiempo.

Para ello, Agrobío cuenta con un equipo de investigadores y técnicos de desarrollo en campo que trabajan en colaboración con el departamento de producción y logística, pilar fundamental para que el agricultor reciba auxiliares con la mejor calidad. En esta línea, insisten en que trabajan "con organismos vivos, por lo que este paso es fundamental, sobre todo para dar el salto a otras zonas agrícolas de forma exitosa".

Éxito

Desde Almería, Agrobío llega a más de 35 países y están presentes en cultivos de Europa, Asia, América y África. Abrir el abanico de países y mercados es fundamental para continuar creciendo y, para ello, el equipo de Agrobío estudia la casuística de cada zona geográfica desarrollando nuevos protocolos y adaptando las herramientas de trabajo atendiendo al cultivo y su infraestructura.