- ¿Cómo responsable de cucurbitáceas, de qué se siente más orgulloso de todo el trabajo realizado?
- Syngenta ha subido el estándar de sabor en sandía blanca y eso ha favorecido al consumo y al desarrollo de esta sandía en España, tanto a nivel productor como consumidor. Eso ha generado mucho valor en el mercado; lo ha cambiado y es muy satisfactorio. El consumidor ha ganado más confianza en el producto, lo que ha terminado favoreciendo a toda la cadena. Con Red Jasper y Kasmira cambiamos las reglas del juego. 

- ¿Es ese sabor la clave del éxito de Syngenta en sandía blanca sin semilla?
- El éxito de Syngenta ha sido tener estas dos variedades con gran sabor, en calibre estándar, que permiten empezar el ciclo de Almería (plantaciones más tempranas) y cerrar el ciclo de La Mancha (las plantaciones más tardías). Todo ello con el mismo estándar de excelente sabor durante todo el ciclo. Al final, el consumidor cuando compra una sandía blanca en tienda siempre encuentra una buena. Red Jasper y Kasmira, a nivel agronómico, son también variedades con producción alta, con uniformidad y muy buena postcosecha.

- ¿Cómo ha influido a este éxito la existencia de un catálogo de calibres tan amplio?
- Esa es la otra parte de la moneda. Hemos completado el catálogo de calibres, siempre con esa referencia de sabor. De esta forma tenemos sandía blanca sin semillas mini de 1,7-2,3 kgs, con referencias como Bibo o Petite Perfection, y hemos diversificado el catálogo con Master. Así, tenemos tres opciones de gama de mini sin semillas y luego hemos completado el calibre de exportación (midi) de unos cuatro kilos con Prestige y terminar con Red Jasper (5-6 kilos) y, finalmente, Kasmira (7-8 kilos).

- En tamaño mini, Syngenta ha lanzado propuestas muy novedosas como Master.
- La única manera de seguir creciendo en sandía mini es con un sabor excelente. Se trata de un mercado muy exigente que está creciendo, sobre todo, de la mano del ecológico. Master es un producto llamativo en tienda con un aspecto exterior verde oliva que, además, tiene un sabor muy alto. Hay empresas que quieren diferenciarse con esa innovación y estamos teniendo muy buenos resultados.

- Para exportación, ¿qué otras sandías contempla Syngenta para el mercado internacional?
- Prestige es una de nuestras sandías blanca sin semillas de calibre midi, de unos cuatro kilos. Prestige es una opción con bastante aceptación en Murcia pero es que, en zonas más tardías de plantación como La Mancha, no se va de tamaño y, además, presenta muy buenas características de aguante y postcosecha para viajar a cualquier mercado.

- ¿Qué destacaría del catálogo de sandía negra, que desarrollan bajo la marca Zeraim?
- Hemos sacado nuestra primera variedad, Bahama. Se trata de una sandía para aire libre, sobre todo para el ciclo de Murcia. Vamos a seguir creciendo y esta campaña vamos a lanzar una variedad de negra para ciclo de Almería, que vendrá a completar Bahama.

- Airen y Macabeo abrieron una nueva línea de melón piel de sapo con carne más firme y más aguante ¿por qué era necesario este giro con respecto a variedades líderes como Jimenado?
- En Syngenta hemos sido los máximos defensores de las referencias de sabor en melón tradicional y somos líderes en Murcia con variedades como Jimenado, sin embargo, la dinámica del mercado ha cambiado y el concepto de producto ahora es distinto. Se busca un melón con una carne más firme, más postcosecha y una mayor durabilidad del fruto. Nuestra propuesta en piel de sapo para este año es MP6391, que da continuidad al programa de mejora iniciado con Airen y Macabeo, con muy buena aceptación ya en Murcia y La Mancha.

- También innovan en formas de fruto, como el piel de sapo MP6130.
- Se trata de un melón piel de sapo de forma redonda que hemos tenido en pequeños ensayos en Murcia, pero vamos a lanzar a gran escala en esa campaña, en fase pre-comercial. En junio lo mostramos en nuestras jornadas en Torre Pacheco y ya hemos mantenido varios encuentros con productores muy interesados en este material que, además, ya han enviado el producto a sus clientes y han quedado muy satisfechos.

- ¿Pero cómo surge arriesgar con un producto así?
- Para diversificar nuestro catálogo del melón piel de sapo teníamos dos opciones: o reducir calibre o buscar algo diferente. MP6130 es nuestra respuesta: un melón con una nueva forma. Es un melón entre 1,5 kg en plantaciones tempranas hasta 2,5 kilos en plantaciones tardías, que estamos trabajando en el manejo agronómico que, en líneas generales, no se parece al de un melón piel de sapo estándar. Nos gustaría que MP6130 abriese una nueva categoría.

- ¿Qué propone Syngenta en charentais para esta campaña?
- Ahora mismo Syngenta tiene una situación muy buena en cuanto a charentais, en ascenso gracias a la buena aceptación de nuestras variedades en los productores franceses en España. En este catálogo tenemos Arpon y Tazha, que ya están consolidadas en el segmento temprano (trasplantes de marzo). Sin embargo, hemos hecho una importante apuesta por cubrir los trasplantes extra-tempranos (febrero y principios de marzo). Para ello, hemos puesto en el mercado Salomon, a la que le auguramos unas muy buenas perspectivas por ser una variedad muy competitiva. Salomon asegura calibre de un kilo, tiene carne firme pero con sabor, con buen escriturado, uniforme y con una planta fuerte con resistencia a ceniza y a pulgón. Por otro lado, Escalibor es la variedad con la que completamos el catálogo para trasplantes de marzo.

- Respecto al melón amarillo, ¿qué destaca del catálogo?
- Como ocurre con la sandía negra, todo el desarrollo lo realizamos bajo la marca Zeraim. En este momento hay dos referencias en el mercado: Party, para abril, y Maillot, para trasplantes de mayo, tanto en La Macha como Murcia. Maillot es una variedad ya consolidada entre las empresas de Murcia, pero Party está teniendo un crecimiento excelente en cultivo ecológico gracias a su resistencia a oídio, la mayor que hay en el mercado para temprano. Como novedad, pondremos en el mercado el melón amarillo MY8128, para ciclo tardío en trasplantes de mayo, con calibre de exportación y resistencia a oídio.

Almudena Fernández