El agricultor almeriense es pionero en muchos aspectos. Sabe cuidar su producto desde el origen para que cuando llegue a la comercialización tenga la máxima calidad y ofrezca garantía a la distribución y, por tanto, también al consumidor. Ese cuidado por el producto hortícola almeriense nace desde que la plántula llega al invernadero.

En ese proceso de manejo del cultivo hay determinadas técnicas ante las cuales los productores almerienses han ido innovando de la mano de empresas consolidadas y expertas en ofrecer soluciones a medida. C.Navalón es un claro ejemplo de una empresa comprometida con el campo almeriense. Con casi cuatro décadas de experiencia en el sector del tutorado, C.Navalón ha logrado consolidar su catálogo hasta el punto de ofrecer al agricultor tutores para pimiento de todas las dimensiones y cumplir así con cualquier exigencia que llegue desde sus clientes.

El gerente de esta empresa alicantina, José Vidal, explicó a FHALMERÍA que desde hace varias campañas ofrecían un servicio de clips de las medidas estándar (5, 6´5, 8, 12, 5, 15 y 19 centímetros) pero, en la actualidad, ya pueden servir material flexible que puede adaptarse a cualquier medida y a cualquier cultivo que necesite de estos tutores. José Vidal explicó que todos estos clips están fabricados en alambre galvanizado, de modo que su corrosión es más difícil y, además, los hay tanto en alambre duro como blando “ajustándonos así nuevamente a las demandas de los distintos agricultores”, insistió.

En este afán por responder fielmente a los productores hortofrutícolas almerienses, que suponen más del 80% del total de su clientela, C.Navalón dio en 2018 un paso adelante y adquirió nueva maquinaria con la mejorar la producción de tutores de acuerdo a cualquier medida que le exijan los agricultores.

Junto a los clips para pimiento, que son probablemente el producto con mayor demanda de C.Navalón, la empresa alicantina suministra ganchos para el cultivo de calabacín o perchas para el descuelgue del tomate.

Almudena Fernández