El uso de fibra de coco como medio de cultivo sin suelo es una de las técnicas que más se han extendido en la producción hortícola. Usada bajo distintos formatos como el soporte de cultivo Grow Bag, o placa de fibra de coco, supone una alternativa al cultivo tradicional que mejora la producción al garantizar mayor disponibilidad de agua y nutrientes y mejorar el desarrollo radicular. Además, no se compacta y permite una fácil rehidratación del medio de cultivo. 

Otra de las ventajas de cultivar sin suelo, y que influye directamente en el desarrollo de la planta, es que permite una mejor gestión de la sanidad vegetal. Al estar la planta en un medio de cultivo independiente del suelo, es mucho más fácil controlar las plagas y enfermedades o incluso retirar y reponer las plantas afectadas.

Por otra parte, la fibra de coco también se puede incorporar al terreno antes de la plantación en cultivos en suelo para mejorar su estructura, capacidad de aireación y drenaje. De este modo, traslada sus beneficios al terreno mejorando las condiciones productivas de cultivos hortícolas.

Producto y asesoramiento bajo un mismo servicio
Bajo la marca Golden Grow, la empresa Projar fabrica sus propias mezclas de fibra de coco, con un amplio catálogo de formatos y envases adaptados a las necesidades de cada producción. Esto les permite controlar la calidad del producto en todas las fases de elaboración antes de llegar a manos del cliente.

Su conocimiento sobre la fibra de coco sumado a sus más de 20 años de experiencia en hidroponía hortícola, les permite aconsejar a los agricultores sobre cuál es la mejor solución a su cultivo, ofreciéndoles asesoramiento agronómico personalizado y producto bajo un mismo servicio en toda la península.