Esta partida supone el cierre de actuaciones a las que se suman los 11,6 millones aprobados por la Junta de Andalucía el 1 de abril de este año para la ejecución de la obra de los conductos de concentración de vertidos de los núcleos urbanos en el municipio, y la inversión de 6,2 millones de euros aprobada en 2016 por el gobierno autonómico en la EDAR de El Cautivo.

Níjar cierra de esta manera el conjunto de infraestructuras necesarias para canalizar las aguas residuales de los principales núcleos de población, y con ello cumple con los parámetros para crecer hasta los cincuenta mil habitantes, ya que ahora si garantiza la capacidad de acogida necesaria en redes de saneamiento y ciclo del agua.

Con la construcción de los nuevos colectores, la inversión hecha en depuradoras y los 1,8 millones de recursos propios que el consistorio incorpora al plan, el municipio adquiere las dimensiones técnicas precisas para dar respuesta tanto al crecimiento del sector agrícola y turístico como, sobre todo, a la puesta en marcha del Puerto Seco o complejos industriales como los estudios cinematográficos para los que Níjar fue catalogada como enclave ideal. “Es el programa de obras públicas por el que hemos trabajado durante cinco años y que ahora llega en el momento justo, porque tras el Covid-19, necesitamos de estas infraestructuras que no sólo activan la economía o nos garantizan futuro, sino que permiten soportar todos esos sueños de futuro que, a partir de hoy, ya no están en el campo de los sueños, sino en el de las realidades”, afirma la alcaldesa Esperanza Pérez.

El plan ideado por la alcaldesa Esperanza Pérez Felices se ha venido desarrollando en distintas fases con el apoyo de la Junta de Andalucía durante los últimos cinco años, y ahora culmina su fase principal con la instalación de los colectores hasta la nueva depuradora, con una inversión sobre el terreno superior a los 20 millones de euros. “Tenemos que entender que el anterior plan es de la época del alcalde Joaquín García, y se hizo para una estimación de población de 15.000 habitantes. La situación económica que nos encontramos al recuperar el gobierno, después de la gestión del PP en Níjar, con más de 20 millones de deuda bancaria, más tres millones de euros en facturas pendientes de pago, obligó a liquidar primero los compromisos económicos con proveedores y bancos, antes de poder meternos a hablar de futuro. Ahora no sólo hemos conseguido eliminar esos créditos y deudas directas, sino que invertimos la misma cantidad que otros malgastaron en lo importante, en Níjar, sin que ello suponga hipotecar el Ayuntamiento y sin dejar a deber nada a nadie”, asegura la primera edil.