Algunos fitosanitarios son más tóxicos para los organismos del suelo que otros y pueden persistir durante largos períodos de tiempo. El tipo de suelo y el tipo de pesticida también pueden afectar a la persistencia de los fitosanitarios: lo que es cierto es que algunas materias activas se han venido aplicando vía riego y ahora nos encontramos con un problema en cuanto su persistencia en el suelo. Una legislación cada vez más limitante en cuanto al uso de materias activas, hace que los productores se puedan encontrar con serios problemas a la hora de cultivar una determinada hortaliza en un suelo contaminado por algún residuo de plaguicida no autorizado en ese determinado cultivo, ya que las distintas analíticas realizadas a lo largo del ciclo pueden mostrar trazas de ese plaguicida no autorizado.

Igualmente y en mayor medida, las explotación que cuente con certificado ECO, o bien que esté en periodo de reconversión, se puede ver afectada por la presencia en el suelo de dicha finca de algún residuo fitosanitario aplicado años atrás, pero que aún no se haya degradado y esté en la tierra, con los consiguientes problemas que esto puede acarrear al productor en cuanto a retirada de certificados por la detección en las distintas analíticas realizadas por las entidades de certificación de trazas de materias activas no autorizadas y que no se pueden aplicar en agricultura ecológica. Cuando un plaguicida es adsorbido por los coloides del suelo (arcilla y materia orgánica) tiende a inactivarse, su concentración en la solución del suelo disminuye y la posible asimilación por el cultivo también disminuye, estableciéndose un equilibrio entre las concentraciones de materia activa disuelta y adsorbida.

El mecanismo de desorción del compuesto dependerá principalmente de la energía de adsorción. Cuanto mayor sea esta energía, más difícil será la desorción del plaguicida de nuevo a la solución del suelo, evitando así el riesgo de absorción por el cultivo. La adsorción influye en la biodegradación por microorganismos ya que éstos no pueden degradar el plaguicida si éste es inaccesible. Está comprobado que los sustratos que no son accesibles a los microorganismos no son atacados o lo son más lentamente. Queda demostrado que la persistencia y evolución de los plaguicidas en el suelo, en gran medida, depende de la acción de estos microorganismos del suelo sobre los plaguicidas, siendo este el mecanismo de descomposición más importante. Los microorganismos del suelo, bacterias, algas y hongos, obtienen alimento y energía para su crecimiento por descomposición de estos compuestos orgánicos sobre todo cuando carecen de otras fuentes.

Una solución a este gran problema puede ser Viventia, un regenerador, revitalizador y potenciador de biodiversidad edáfico que favorece la implantación de los cultivos y que cuenta en su composición con distintas sustancias orgánicas específicas y extractos vegetales que potencian la biodiversidad natural de los suelos, favoreciendo así las funciones defensivas propias de los ecosistemas naturales, presentando además un contenido en materia orgánica con una relación C/N adecuada para el control de nematodos y regeneración edáfica. Su alto contenido en tionarditas aumenta la capacidad de retención de los polucionantes orgánicos y metales pesados de los suelos, evitando así su movilización y absorción por los cultivos, es decir, al mejorar la adsorción del contaminante, la potenciación y multiplicación de ciertos grupos funcionales microbianos nos ayudarán a degradarlo.

Los efectos frente al control de nematodos de este activador orgánico de la rizosfera cuya aplicación multiplica de forma notable la fertilidad de los suelos, así como la vida de los mismos; fue comprobada en el ensayo demostrativo realizado en un cultivo de sandía negra sin pepita en el Campo de Nijar y con fecha de plantación 20 de febrero de 2017. En el sector no tratado la incidencia de nematodos fue un 23,7% mayor que en el sector tratado con Organia Viventia, siendo fitopatógenos un 95% de los nematodos detectados en la muestra no tratada, frente al 88% en la muestra analizada del tratamiento con Organia Viventia. Esta campaña Fertinagro Biotech incorpora el producto de forma gratuita con maquinaria propia para facilitar las labores de aplicación.

FHALMERIA