Cita que ha contado también con la presencia de la parlamentaria de Cs, Mercedes López. “Han querido compartir con nosotros los pasos que se están desde las administraciones para poner fin a la problemática que padecían, ya que Cs fue uno de los partidos que exigió en su momento respuestas en el Parlamento para este colectivo”, ha detallado Bosquet.

En esta línea, la también presidenta del Parlamento, ha resaltado que el“con los anteriores gobiernos socialistas, lo único que imperaba en Almería con la delegación de Medio Ambiente era el caos”.Precisamente, a través de una iniciativa parlamentaria liderada por esta diputada, se acercó a la Junta la situación de “desamparo e incoherencia” que se les había generado a estos agricultores. Así, ha repasado la cronología de la situación que tuvieron que “soportar” los afectados del paraje de Los Trancos en el Acebuche de Almería, que vieron cómo sus fincas quedaban fuera de la demarcación de la masa de agua de la depuradora de Almería, por lo que no podían usar sus aguas para el regadío. Desde el año 1993, el ámbit o de riego de esa comunidad estaba en suspenso hasta que recayera resolución otorgando la concesión de aguas, por lo que los terrenos susceptibles de ser regados estaban pendientes hasta que fueran delimitados por la administración andaluza.“La Junta del PSOE supo en todo momento los hechos y no hizo nada por ofrecer soluciones,sino todo lo contrario, perjudicaron a estos agricultores, quienes después de las inversiones realizadas y de regar con esa agua durante más de 15 años, se les dijo que no pertenecían a esa masa de agua y no se les ofreció alternativa alguna. De repente, le cerraron el gripo”.

"Una situación que ha dado un giro radical con la llegada de este Gobierno naranja”, ha subrayado la diputada almeriense. En esta reunión han podido constatar los avances que se han generado. “La Junta les va a permitir reutilizar las aguas de la depuradora de Retamar, que procesa un volumen de agua suficiente para sus necesidades. Se hará bajo lo que se conoce como proceso terciario”. Este tipo de tratamiento consigue reducir la carga contaminante de aguas residuales permitiendo su reutilización como recurso hídrico alternativo. Ahora, aquellos regantes que se quedaron en su día fuera de esas demarcaciones se han constituido en la que han denominado Comunidad de Regantes de Retamar “y han encontrado el amparo del Gobierno andaluz para poder continuar con sus plantaciones. Ya sólo están ultimando trámites administrativos para el uso terciario de esas aguas, que le otorgarán un hectómetro cúbico”. “Se da respuesta a unos 90 comuneros que cultivan cerca de 300 hectáreas. Aquí está la utilidad de este Gobierno. Ofrecemos soluciones, sobre todo a un sector que es clave en el tejido económico de Almería”, ha aseverado Bosquet.