Un concentrado de material húmico por encima del 95 % para incorporar en el suelo de forma permanente es una herramienta de mejora muy valiosa. La mayor parte de los invernaderos hace tiempo que no aplican materia orgánica de fondo, pues las opciones disponibles suponen en muchos casos más inconvenientes que ventajas. La introducción de estiércol en grandes cantidades crea una incertidumbre pues el grado de maduración es desconocido, la liberación de nutrientes descontrolada, y se introduce una cantidad importante de sales en la parcela, y con frecuencia, se pone en dificultades el cultivo que se establece a continuación.

Por el contrario NOVIHUM es un producto técnico, completamente limpio y homogéneo, obtenido de la transformación del carbón de lignito y es una fuente completamente nueva de material orgánico de alto contenido húmico, sin sales y con un efecto sostenido en el tiempo. Pero si estas características lo convierten a priori en un producto de interés, lo más contundente son los resultados que el uso comercial de NOVIHUM está mostrando. Los efectos sobre el crecimiento vegetativo, la floración y la cosecha, manifestados desde el principio en los cultivos son evidentes.

En pepino de pleno invierno, en varios ensayos establecidos en comparación con otras materias orgánicas NOVIHUM han resultado claramente superior en plena producción coincidiendo con los días más fríos de la campaña. En cultivos de sandía que se están cortando estos días la aplicación de NOVIHUM ha supuesto una ventaja desde el enraizamiento, cuando las condiciones son más difíciles lo que se ha traducido finalmente en producción. Debido a la situación de los desinfectantes químicos, este verano se plantea diferente y va a forzar al máximo la solarización de las parcelas, quedando poco tiempo para faenas de incorporación de enmiendas orgánicas. En estas circunstancias NOVIHUM permite una aplicación rápida tanto antes de la colocación del plástico en el suelo como en los escasos días que queden desde que se levante el plástico hasta la plantación. No hay magia, es la puesta en práctica de los principios de la edafología según los cuales los materiales húmicos son una pieza básica para el desarrollo radicular, la absorción de nutrientes, la eficiencia del riego y en general del funcionamiento del suelo de los invernaderos.

Más información: Manuel Pérez.

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