Hace apenas tres años que el melón piel de sapo Coliseo F1 llegó al campo y en este corto periodo de tiempo se ha convertido ya en todo un referente en su segmento. En esta línea, Mercedes Fernández, Senior Sales Specialist de BASF, afirma que, desde entonces, “ha demostrado la eficacia de su resistencia al virus Nueva Delhi”, una patología que desde 2013 ha provocado continuos quebraderos de cabeza a los productores hortícolas.

El virus Nueva Delhi (ToLCNDV) fue detectado por primera vez en cultivos de calabacín y, de ahí y siempre con la mosca blanca como vector, fue extendiéndose a otros como el pepino y el melón. Con la variedad Coliseo F1, BASF da a los agricultores de Almería la posibilidad de iniciar un cultivo de melón de primavera con todas las garantías de sanidad vegetal, incluso si acaban de terminar otro de cualquier cucurbitácea.

Alto rendimiento

Coliseo F1 está recomendado para trasplantes medios de Almería, a partir del 15 de febrero, y destaca, además de por sus resistencias a Nueva Delhi y oídio, por ofrecer un elevado rendimiento comercial. “Es una variedad de fácil cuaje, homogéneo, que permite al agricultor una recolección agrupada de un melón de alta calidad”, explica Fernández. Para el comercializador, Coliseo F1 supone una garantía de suministro para sus clientes, ya que, gracias a sus resistencias, no deberá lamentar pérdidas de producción y, por tanto, de volúmenes comerciales.

Además, Coliseo F1 tiene un calibre marquista de tres kilos, pero lo mejor está en su interior: es de carne crujiente, tiene un pepitero de color amarillo anaranjado muy atractivo y alcanza un elevado nivel de Brix. Todo ello le ha valido para conquistar a los grandes operadores de melón nacionales, que han encontrado en Coliseo F1 una variedad que “les encaja por calibre y calidad”.