El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha recordado que “se trata de un tramo viario, de seis kilómetros de longitud, considerado como estructurante y que registra un elevado tráfico, da servicio a numerosas fincas por lo que se hacía imprescindible su remodelación”. Además, ha hecho hincapié en que “con este proyecto se ha pretendido mejorar el sistema de evacuación de aguas para evitar así los inconvenientes que producían las acumulaciones cada vez que llovía y perjudicaban la circulación través de obras de drenaje longitudinal con la construcción de cunetas hormigonadas y zanjas drenantes”.

Los trabajos realizados han supuesto una inversión municipal de 725.000 euros y estos han permitido mejorar e incrementar, de manera significativa, la seguridad de esta vía, modernizarla y adaptarla a los requerimientos de los usuarios.

Cabe recordar que el pavimento presentaba irregularidades y un estado de deterioro debido a deficiencias estructurales en cuanto a roderas, piel de cocodrilo y erosiones que vienen derivadas de la degradación por el paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas, y con serios problemas para evacuar las escorrentías superficiales, lo que dificultaba en época de lluvias la circulación al tráfico rodado.

El regidor ha recordado “la importancia de contar con infraestructuras viarias que presenten las mejores condiciones de uso, adaptadas a las verdaderas necesidades de los agricultores y que, además, sean acordes a un sistema productivo de referencia a nivel europeo”.

Por último, mencionar que la obras han consistido básicamente en el refuerzo del pavimento de la carretera con el extendido de una capa bituminosa en caliente, así como renovación y colocación de señalización, balizamiento y marcas viales.