En poco tiempo, Ginegar ha crecido exponencialmente en un mercado que ya conocía muy bien, pero que, a su vez, cuenta con una alta competencia de empresas que están en continua innovación. Sin embargo, el arduo trabajo de Ginegar por encontrar la combinación perfecta de cubiertas entre las necesidades de sus clientes y una solución personalizada está ofreciendo los mejores resultados para el sector, ya que todos los productos de Ginegar vienen avalados por procesos creativos de desarrollo, de tecnologías avanzadas y de materiales que poseen características mecánicas, ópticas y térmicas que garantizan una mayor durabilidad, resistencia a las diversas condiciones climáticas y una menor presencia de plagas y enfermedades.

Pionera

La empresa, que se fundó en 1969 en Israel, cuenta con un as en la manga, su amplia experiencia de más de 50 años, lo que le ha permitido ser pionera en la tecnología de 5,7 y 9 capas. Ademas, otro de los aspectos más destacados de Ginegar es que sus cubiertas no son solo para cubrir el invernadero con plástico, sino hacerlo de forma rentable, mejorando tanto la productividad como la calidad del cultivo. Desde Ginegar, la multinacional más puntera y con tecnología más vanguardista en el ámbito del plástico, también están comprometidos con la cercanía y el excelente trato a los agricultores, con los que trabajar para conseguir un bien común en todo el proceso de negocio.

De hecho, desde el primer momento, Ginegar cuenta con un amplio grupo de profesionales que hacen posibles los productos y servicios día a día, a través de un trabajo competente y meticuloso. Y es que, la firma israelí pone a disposición del agricultor sus mejores avances y desarrollos con el objetivo de potenciar su crecimiento e incrementar la rentabilidad final de una campaña agrícola.

Elena Sánchez