Las Asociación de Jóvenes Agricultores ASAJA-Almería pone de manifiesto las necesidades que tienen agricultores y ganaderos en el ámbito municipal, con el principal objetivo de que las administraciones locales de la provincia pongan el foco en estas cuestiones que son importantes para el desarrollo de la agricultura y ganadería almeriense y el desarrollo de los pueblos, en los que estas actividades ligadas al sector primario soportan el grueso de su economía.

Con el fin de que las propuestas de ASAJA-Almería, que recogen la voz de los profesionales agrarios, sean tenidas en cuenta y se implementen políticas municipales en las que los productores reciban el apoyo que necesitan, en esta Organización Agraria se ha elaborado un documento en el que se especifican las medidas y acciones que precisa el campo en todos los municipios.

“Entre las materias de competencia local en las que consideramos que deben actuar los diferentes gobiernos locales almerienses figuran cuestiones relacionadas con la fiscalidad, la higiene Rural, agua, seguridad rural, mejora de caminos rurales, comunicación digital o sanidad vegetal”, ha detallado Adoración Blanque, presidenta provincial de ASAJA-Almería.

PROPUESTAS

Fiscalidad. Reducción del IBI rústico a los agricultores y ganaderos con el objetivo de compensar la escalada de los costes de producción de las explotaciones, así como la reducción de las tasas en licencia de obras para aquellos agricultores que necesiten renovar o modificar sus unidades productivas.

Higiene Rural. Es necesario una actitud vigilante por parte de los Ayuntamientos en la gestión de los subproductos agrícolas, apoyando a la economía circular de estos subproductos; realizando limpiezas selectivas, así como acciones dirigidas a evitar los vertidos que dañen la imagen de nuestra agricultura.

Agua. Apoyar a los regantes facilitando la disponibilidad de recursos hídricos, así como las obras / licencias necesarias para llevarlas a cabo. Además, es necesario que soliciten a la administración competente la ampliación de la bonificación para el agua procedente de desaladora, con el objetivo de paliar el alto precio que tiene que pagar el agricultor por este tipo de recurso.

Seguridad Rural. Establecer un sistema de vigilantes rurales o sistemas de cámaras de vigilancia que aporten seguridad en los entornos rurales. La falta de vigilancia provoca robos y destrozos en las explotaciones, repercutiendo esto en el aumento de costes a los agricultores y ganaderos. Por ello el campo precisa del apoyo de las instituciones municipales para paliar la carencia de medios que existe actualmente; así como acciones coordinadas entre los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad.

Asfaltado y mejora de los caminos rurales de titularidad municipal. Estas vías son primordiales para los agricultores y ganaderos y para los ciudadanos que viven alejados de los núcleos urbanos por lo que es necesario que se mejoren y mantengan en condiciones óptimas y seguras, mejorando tanto el firme de la vías como las luminarias.

Ampliación de la red de fibra óptica. La digitalización del sector provocada por la modernización de los invernaderos en unos casos y por las exigencias administrativas en otros han creado la necesidad de que los productores precisen en muchos casos acceso a Internet.

Control de plagas. Los parques, humedales o espacios naturales, en muchos casos, se convierten en un foco de plagas que son perjudiciales para la sanidad vegetal de nuestros cultivos. Por ello es necesarios que se mantengan estas zonas desinfectadas y con ello evitar la propagación de estas por los cultivos de la zona.