Los trabajos de pavimentación en el camino rural Mancha Onáyar, conocido como camino de Los Cecilios, se encuentran ya en marcha y está previsto que finalicen en los últimos días del presente año. Se trata de una actuación de suma importancia, dado que es una vía muy transitada para el transporte de mercancías y la entrada y salida a numerosas explotaciones agrícolas. Los dos tramos sobre los que se actúa dejarán de estar en tierra, lo que supondrá un importante salto de calidad para todos los usuarios de esta vía.

Las obras se realizan sobre una longitud total de 2.765,26 m., divididos en dos tramos: el primero de 1.877,4 m. y el segundo de 887,86 m. El tramo más largo se sitúa en el trazado hacia el norte por el paraje Loma Cabriles conectando el camino de las Tuberías con el camino de Los Cecilios, y el segundo es el que une el camino Mancha Onáyar con el camino de Los Compradores. El presupuesto para la ejecución de los trabajos asciende a 295.653,83 euros, y el plazo de ejecución, desde que se inició la obra en los primeros días del mes de octubre, es de 12 semanas.

El concejal de Agricultura y Medio Ambiente, Manuel Martínez, ha recordado que “desde el equipo de Gobierno seguimos dando pasos para que nuestro sector agroindustrial tenga las mejores condiciones para desarrollar su actividad, y que contemos con la red viaria rural en las mejores condiciones posibles repercute directamente en beneficios de todos”. Al hilo, ha reiterado “el compromiso municipal de mejorar y modernizar la accesibilidad y seguridad de nuestro extenso entramado viario, utilizado a diario por miles de agricultores y trabajadores de la agroindustria”.

Actualmente se está trabajando de forma paralela con diferentes medios mecánicos. En primer lugar, los operarios están limpiando, cargando y acondicionando las tierras y restos existentes en los márgenes del camino mediante una retroexcavadora, con el fin de conseguir una plataforma más ancha y homogénea, y en segundo lugar se realizan tareas con una motoniveladora para el rasanteo y nivelación del camino original, y el posterior aporte de zahorra artificial para la formación de la explanada que ha de hacer de cimiento a la nueva capa de rodadura.

El proyecto define la pavimentación con mezcla bituminosa en caliente de los dos tramos de camino actualmente en tierra, la ejecución de bermas de hormigón que protejan el pavimento y la correspondiente señalización horizontal y vertical.