Los invernaderos almerienses se han enfrentado a diferentes cambios a lo largo de los últimos años. Tal y como revela el anuario agrícola del ejercicio 2023 de FHALMERÍA, el campo se enfrenta a una reducción de superficie destinada a la agricultura ecológica.

Sin embargo, el control biológico ha experimentado un crecimiento del 4,20% en el último año. Un incremento que coincide con una mayor incidencia de ciertas plagas como el trips, el pulgón y la araña que se ven favorecidas por las altas temperaturas.

Todos estos factores y circunstancias, combinados con las constantes demandas del mercado, deben tenerse en cuenta por parte de los horticultores para poder satisfacer las necesidades de los consumidores y, a su vez, producir de la forma más rentable y sostenible.

Menos hectáreas, más sanidad vegetal

A pesar de haber sufrido una disminución de en torno a 250 hectáreas durante el año pasado, la superficie ecológica en Almería todavía supera a los datos de 2022. Esta reducción podría haber supuesto un decrecimiento de la superficie con control biológico. No obstante, esta aumentó un 4,20% en total en la última campaña.

El pimiento se posicionó como el cultivo de referencia del control biológico con casi el 100% de su superficie. Seguido de este, la segunda implantación más alta fue la berenjena (82%) y el pepino, que también aumentó significativamente hasta el 76%. Entre las causas de este crecimiento del control biológico y la disminución de la superficie en agricultura ecológica podría estar el incremento de la incidencia de ciertas plagas.

El Anuario 2023 apunta que hay tres plagas particularmente favorecidas por los inviernos cada vez más cortos y calurosos: el trips, el pulgón y la araña. Tres plagas a las que hacer frente El pulgón se encuentra entre una de las plagas más problemáticas identificadas por los expertos de sanidad vegetal. Tanto el verde (Myzus persicae) como el negro (Aphis gossypii) pueden combatirse con la ayuda del control biológico, pero en muchas ocasiones, requiere del apoyo de fitosanitarios para erradicar la plaga. “Lo mismo sucede con la araña roja (Tetranychus urticae), la cual afecta cada vez más a todos los cultivos, sobre todo en períodos cálidos”, explica del responsable de Biocontrol de SIPCAM Iberia Daniel Mulas.

“Respecto a los trips, cabe destacar el Parvispinus, ya que ha sido la plaga más presente en 2023 sobre todo en el Poniente almeriense”, analiza. “Como muchos agricultores han podido observar, causa daños muy fuertes en hojas y frutos, y su control es muy difícil por su gran movilidad. Además, en el cultivo del pimiento en particular, puede llegar a ser todavía más complicado debido a la fuerte implantación del control biológico”, añade Mulas.

Estas tres plagas han sido destacadas por el Anuario 2023 de FHALMERÍA como las más problemáticas y, con el propósito de ayudar a los agricultores almerienses, SIPCAM Iberia ha realizado significativos avances para ofrecer una estrategia que aporte una solución a estas plagas.

Varios ensayos llevados a cabo en Las Norias en pepino variedad Doria han demostrado la eficacia de la aplicación conjunta de EPIK (Acetamiprid 20%) y RELEVANT-OIL (Sales potásicas 13,04%) a su dosis baja para combatir el pulgón. “La aplicación conjunta de ambos insecticidas es complementaria, ya que el modo de acción de RELEVANT-OIL hace más penetrante al Acetamiprid en el insecto logrando asfixiarlo allá donde haya una buena cobertura”, observa el Product Manager.

En cuanto al control de trips Parvispinus, un ensayo en El Ejido en octubre de 2023 confirmó que ADINA (Azadiractin 1%), aplicado vía riego por goteo, consigue romper el ciclo del trips en el suelo y reducir su población. Tras compararse con un producto estándar ecológico, esta solución vegetal demostró que su sistemia hace que el trips sea menos voraz en la parte aérea de la planta.

Como complemento, se aplicó RELEVANT-OIL como insecticida de contacto sobre toda la masa foliar, consiguiendo reducir la población de formas móviles en la parte aérea. “Además, para mejorar más aún el control de esta plaga, como medida cultural se instaló una lámina plástica en el suelo que ayuda a romper el ciclo biológico de la plaga”, explica Mulas. “Con esta combinación, se redujo el destrío por pimientos dañados por Parvispinus y la planta estuvo más sana”, indica el responsable. La prueba de desarrollo logró demostrar que esta estrategia es útil en cultivo ecológico y combina prácticas culturales y fitosanitarios de origen natural certificados en agricultura ecológica, en línea con la demanda actual del mercado.

La araña roja (Tetranychus urticae) también ha sido objeto de estudio en los últimos años en SIPCAM Iberia. En concreto, se ha tenido en cuenta su control con el acaricida de referencia FLASH UM (Fenpiroximato 5,13%), que ofrece un gran control frente a formas móviles de ácaros tetraníquidos y eriófidos como los Vasates, Aculops lycopersici. Para afianzar el posicionamiento de esta solución frente a araña, se realizaron ensayos de eficacia que permitieron una vez terminados la inclusión de la materia activa en la lista de producción integrada para hortícolas de invernadero, con la restricción de aplicar antes de la suelta de fitoseidos.

“La agricultura hortícola se enfrenta a desafíos significativos en el control de plagas, pero desde SIPCAM Iberia seguiremos trabajando para ofrecer al sector agrícola las mejores soluciones en cuanto a sanidad vegetal para que los profesionales agrícolas puedan obtener la mayor rentabilidad y productividad de sus cosechas”, concluye Mulas.