El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha asegurado que el Gobierno de España trabaja "por una agricultura con agricultores y agricultoras, que sea capaz de producir alimentos y, al mismo tiempo, mantener unida y cohesionada a nuestra sociedad".

Para el ministro, "solo podemos garantizar el progreso si es sostenible desde el punto de vista económico, de empleo, territorial y humano". Por ello, el Gobierno impulsará una Ley de Agricultura Familiar para apoyar su función estratégica en el desarrollo social y económico de los territorios, su capacidad para ofrecer alternativas de empleo a jóvenes y mujeres y su positiva repercusión ambiental.

Con esta iniciativa legislativa, el Gobierno quiere ayudar a la agricultura familiar a superar los retos de futuro, que pasa por facilitar el acceso a la tierra y a la financiación, incorporar la digitalización, fomentar el relevo generacional y dar visibilidad al trabajo de la mujer en el campo, entre otros aspectos, y avanzar hacia sistemas alimentarios sostenibles.

"La agricultura familiar es la base de un sector agroalimentario sostenible, social, rentable y competitivo", ha subrayado. En España, este tipo de agricultura representa el 82 % de las 914.000 explotaciones agrarias. Según ha dicho, sobre este modelo "deben pivotar las transformaciones que se están efectuando en relación con la construcción de sistemas alimentarios sostenibles".

Luis Planas ha participado hoy en la clausura de la VIII Conferencia Global de Agricultura Familiar que, organizada por el Foro Rural Mundial, se ha celebrado en Vitoria–Gasteiz bajo el lema "Sostenibilidad de nuestro planeta". El ministro ha destacado la oportunidad de este encuentro para el análisis de las principales inquietudes de muchos agricultores familiares y los avances alcanzados en estos últimos cinco años desde la Declaración del Decenio para la Agricultura Familiar.

En su intervención, el ministro ha pedido un esfuerzo conjunto para apoyar la agricultura familiar, que se configura como un elemento clave para alcanzar sistemas alimentarios sostenibles, por su fuerte compromiso con la creación de empleo, el desarrollo social y económico del territorio y la conservación de los recursos naturales. De esta forma, contribuye de manera decisiva a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

Planas ha valorado la Declaración del Decenio para la Agricultura Familiar 2019-2028, que ha servido de marco a las iniciativas legislativas de muchos países para apoyar este tipo de producción, desde una perspectiva integral. Así, ha explicado que España está desarrollando numerosas actuaciones que ponen de manifiesto el firme compromiso político asumido por este Gobierno.

APOYO A LA AGRICULTURA FAMILIAR

Ha explicado que España ha orientado esta declaración hacia el modelo familiar, para darle a la agricultura una dimensión más humana. En este marco, España cuenta con un Plan de Acción para la Agricultura Familiar, elaborado por el Comité Español para el Decenio de la Agricultura Familiar, que servirá de guía para las políticas que va a emprender el Gobierno en los próximos años.

Con estas políticas, ha dicho el ministro, se quiere apoyar la "función estratégica" de este modelo de producción en la viabilidad de los territorios, mediante la producción de alimentos sostenibles, la oferta de alternativas de empleo para mujeres y jóvenes y su preocupación por el cuidado del entorno. "Su dimensión humana es clave para el presente y el futuro de nuestro medio rural".

Así, la futura Ley de Agricultura Familiar priorizará este modelo por su mayor valor social y su fragilidad. En ella se atenderán cuestiones como las características de las explotaciones y sus titulares, aspectos fiscales o los arrendamientos. Ha señalado que el Gobierno dispondrá de un anteproyecto de ley a finales de año para que pueda iniciar su tramitación parlamentaria en 2025.

Por otro lado, ha mencionado las medidas que impulsa el ministerio para dar apoyo al sector agrario y que, en gran medida, benefician a la agricultura familiar, como la Política Agraria Común, las inversiones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y las facilidades para acceder a la financiación y a la suscripción de los seguros agrarios.

Para el ministro, este esfuerzo demuestra el compromiso de España con la transformación de los sistemas alimentarios hacia sistemas de producción que incluyan la sostenibilidad económica, social y ambiental. Ha añadido que, para lograr este objetivo, es fundamental la participación de una agricultura más familiar y social, vinculada al territorio y con una visión a largo plazo. "No puede haber futuro sin sostenibilidad, pero no puede haber sostenibilidad sin rentabilidad", ha afirmado, "y la agricultura familiar es un modelo óptimo para conseguir esa sostenibilidad rentable y una cohesión social y territorial fundamental para el conjunto de nuestras sociedades".