La Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas, COAG, participa en la reunión trilateral del Grupo de Contacto de Tomate del Comité Mixto FH Francia, España y Italia que se celebra en Almería a partir de esta tarde y que se prolongará hasta mañana, 17 de abril por la tarde, y a la que acudirán representantes del sector de Frutas y hortalizas de los tres países, España, Italia y Francia.          

Así, por parte de COAG, se ha reunido una delegación compuesta por representes de la organización de las provincias de Almería y Granada que estará presente durante los sucesivos debates e intercambios desarrollados a lo largo de estos dos días en este marco. En concreto, acudirán a los actos programados el secretario Provincial de COAG Almería, Andrés Góngora; el secretario Provincial de COAG Granada, Miguel Monferrer; el secretario de Organización de COAG Almería, Antonio Moreno; y la secretaria Local del Comité de la Comarca del Bajo Andarax de COAG Almería, Mª Carmen Suánez; todos/as ellos/as, además, productores de tomate.          

En este sentido, la organización agraria hará especial hincapié en la defensa de uno de sus principales objetivos, esto es: la necesidad de fortalecer y mejorar los controles que en la actualidad se ejercen sobre las importaciones de terceros países. Y, más allá de este desafío general, de forma concreta, trasladará al Grupo una petición a la Comisión Europea para que ponga en conocimiento de los principales agentes agrarios toda la información referente al cobro de las tasas arancelarias que se ejercen sobre las importaciones de tomate de terceros países, y muy especialmente sobre los cultivos procedentes de Marruecos; además de la puesta en marcha de una vigilancia exhaustiva sobre los productos fitosanitarios que entran a través de nuestras fronteras.          

La relevancia de estos intercambios viene determinada por varios factores, amén de vehicular el encuentro de los principales representantes del sector los tres países europeos; su importancia subyace en la trascendencia que para el tomate alberga el hecho de hacer un frente común en su defensa a nivel europeo, al encontrarse su existencia en alto riesgo de desaparición ante la presión que países como Marruecos están ejerciendo sobre el mismo. Factores como la soberanía alimentaria o la preferencia comunitaria son medidas de contención que el cultivo reclama y que solo pueden ser ‘cultivadas’ a través de las decisiones que se adquieran en reuniones como las celebradas estos días en Almería, y que, a la postre, encaucen el necesario movimiento y cambio de dirección en instituciones como la Comisión o el Consejo europeos.        

Reivindicaciones agrarias      

Durante los debates de trabajo se realizará asimismo una puesta en común sobre el proceso de movilizaciones que el sector agrario está atravesando y que, curiosamente, comparte la mayoría de las reivindicaciones y protestas en los tres países reunidos. Un factor con el que se vuelve a demostrar que la única salida para el sector y para sus cultivos más vulnerables, en este caso el tomate, pasa por la protección del mercado, la defensa de la soberanía alimentaria y la puesta en marcha de todas las medidas necesarias sobre las que orquestar políticas fundamentales como la preferencia comunitaria, unas normas cuyo éxito quedará determinado por la eficiencia y precisión con la que se consiga poner en práctica el control de las importaciones de terceros países.