El carácter de la explotación, con un perfil de agricultor propietario de 2-3 Ha invernadas, ha facilitado mediante el esfuerzo personal y la voluntad de mejora continuada, una comunidad de conocimiento compartido y un ecosistema empresarial complejo de apoyo a la producción y la comercialización.

El aporte de agua y fertilizantes al cultivo se realiza conjuntamente, y únicamente una fracción mínima del abonado escapa de la técnica de la fertirrigación. Superados ya los obsoletos sistemas de aplicación mediante tanque presurizado (conocidos como “abonadoras”), hoy la máquina de venturis es el sistema hegemónico en la región, y la conductividad eléctrica el modo de control de la dosificación. Muchos agricultores desconocen o no se guían por la necesidad nutricional del cultivo expresado en cantidad por superficie o relacionada con las extracciones y producción. Se sigue una consigna de Conductividad Eléctrica, diferencial o final, compartida por diferentes soluciones madre.

La experiencia en varias explotaciones de cultivos hortícolas en la región durante los últimos años ha validado la utilidad de los sistemas basados en bombas dosificadoras de control avanzado, superior al alcanzable por los sistemas venturi por diversos aspectos: mayor precisión en la aplicación del fertilizante, equilibrio del balance entre nutrientes sin necesidad de calibraciones frecuentes, reemplazo de componentes (como las electroválvulas de paso de fertilizante a cada venturi) y posibilidad de dosificación proporcional precisa de productos que no alteran la conductividad, como los quelatos.        

La capacidad de las dosificadoras de administrar un volumen preciso sin verse afectadas por la densidad o viscosidad de los abonos, y de aplicar caudales muy diversos, desde mililitros por hora, permite el empleo de abonos líquidos concentrados, e incluso ácidos puros sin rebajar, con el ahorro en espacio y mejora en la seguridad al no tenerlos que diluir.        

Fruto de la experiencia contrastada en fincas comerciales en el Poniente y el Levante, y de la propia capacidad de las máquinas ITC, hemos gozado de la confianza de dos centros de investigación relevantes en los que durante la temporada 2023-2024 se está ejecutando la fertirrigación en 3 invernaderos de última generación para ensayos, todos ellos con cultivo hidropónico.    

 La principal ventaja para estos usuarios de lujo ha sido la precisión y la reducción de volúmenes y caudales aplicados, resultando en proporciones muy pequeñas de fertilizante/agua incluso con caudales de agua mínimos dentro de un rango amplísimo en el que se puede regar desde 3 líneas porta-goteros hasta el invernadero al completo, ejecutando la fórmula al momento y pudiendo aplicar cualquier combinación por diversa que sea. Siempre garantizando la suficiencia del sistema para aportar la nutrición al cultivo.        

La versatilidad del sistema ha permitido emplear dosificadoras ITC en los diversos puntos donde debía garantizarse un caudal o volumen determinado, no únicamente nutrición, sino también la recirculación de lixiviados en proporciones, o la dosificación de desinfectantes de diversa naturaleza.        

 Una ventaja adicional que ofrece para este tipo de usuario exigente el sistema es la completa trazabilidad de agua, abonos y parámetros leídos. Es muy fácil con Water Controller 3000, conocer para cualquier sector de riego, el volumen de agua y abono en cualquier período que quiera definir el usuario. Estos datos se disponen en múltiples formatos, desde tablas o informes en formato pdf, como en excel que permite al usuario trabajar los datos de manera versátil.        

Sin embargo, la mayor ventaja ofrecida por el sistema de fertirrigación compuesto por controlador ITC con dosificadoras de control avanzado es la rentabilidad por el mejor aprovechamiento del abono. En efecto, al mantener garantizado el equilibrio entre tanques, y permitir caudales muy diversos de soluciones muy concentradas, reduce los costes en abono y energía y permite que el cultivo exprese su mejor producción.